Muñoz y Netto visualizan la transformación de la enseñanza como un proyecto colectivo
La ministra de Educación, María Julia Muñoz, y el presidente de la ANEP, Wilson Netto, coincidieron en la importancia de "mirar hacia adelante" en la enseñanza uruguaya. Ratificaron que las metas trazadas son concretables y que es fundamental actuar en colectivo; ver la transformación con ese enfoque y no desde individualidades. Aseguraron que mucha gente trabaja para cumplir los objetivos.

En diálogo con la Secretaría de Comunicación Institucional, tanto la ministra Muñoz, como Netto, presidente del Consejo Directivo Central (Codicen) de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), expresaron la tranquilidad de poder cumplir con los objetivos trazados en el programa de Gobierno respecto a la transformación del "ADN de la educación".
“El cambio del ADN es cambiar la educación desde sus bases y las nuevas escuelas de tiempo completo, como la recientemente inaugurada en Delta del Tigre, son ejemplo de ello”, dijo la ministra, quien se refirió al futuro de la transformación.
“Si una reforma depende de dos personas, no es una reforma. La transformación está sustentada en un programa de gobierno que hicieron muchas personas, al que aportaron muchos, y la llevan adelante todos los orientales del partido que sean. Los compañeros que se fueron seguirán aportando desde nuestra fuerza política”, indicó Muñoz en alusión al exsubsecretario Fernando Filgueira y el exdirector de Educación Juan Pedro Mir.
La ministra enfatizó que se trata de un trabajo colectivo. “El que desconozca que la participación activa de maestros y profesores es necesaria para un cambio, desconoce un proceso en el que hay miles de niños y adolescentes, y trabajadores de la enseñanza. Sin ellos no podemos hacer nada”, añadió.
Netto recordó que las metas propuestas son ambiciosas. “Para poder llegar a ellas estamos procesando en paralelo una transformación del sistema. Un sistema que tenía la misión en educación media de atender a algunos y hoy se desafía a atender a todos; además, con una educación de calidad, que requiere cambios conceptuales y organizacionales, y que también requiere infraestructura. Es imperioso llevar adelante esas transformaciones. En ese proceso estamos, porque las metas así lo requieren”, dijo.
“Nuestro país tiene un porcentaje de jóvenes acotado respecto a los de la región. La calidad de la educación y de los aprendizajes son imprescindibles para transformar la sociedad desde el punto de vista social, productivo y económico. Todos queremos transformar la calidad de vida y en ello la educación juega un rol clave”, indicó Netto. “En dos períodos generamos condiciones de educabilidad acordes. Este es el tercer período, con los aprendizajes como eje, junto a la transformación de las instituciones para lograr conocimiento de calidad”, sostuvo.
Netto aseguró que son muchos los equipos que trabajan en este proceso, con una lógica territorial que permite evaluación, diálogo y participación de representantes de la educación, para concretar acuerdos y una correspondiente rendición de cuentas.
“Cuando uno sale de la retórica de los discursos e ingresa a las acciones y a la estrategia para desarrollar esas acciones, siempre puede haber visiones distintas. Cada uno tiene su lugar y es opinable. Quienes tenemos la responsabilidad de llevar adelante los cambios entendemos que los caminos deben tener cierta viabilidad”, añadió Netto, quien agregó que es un tema que escapa a la opinión individual de las personas.
“Este es un proyecto colectivo que involucra equipos y grandes transformaciones de la sociedad, porque hay que transformar un sistema y eso se hace con acciones e involucrando a los actores para que se concrete”, insistió.
Las declaraciones de ambos fueron realizadas tras su participación en el acto inauguración de una nueva escuela de tiempo completo, esta vez en Delta del Tigre, departamento de San José.