Simposio Internacional en Montevideo
Una extensa reflexión sobre la problemática del consumo abusivo de alcohol tuvo lugar en Montevideo esta semana en el Primer Simposio Internacional sobre Uso Problemático de Alcohol que organizaron la Junta Nacional de Drogas (JND) y la Facultad de Medicina de la Universidad de la República (UdelaR).
En ese contexto, se debatió sobre el daño que el alcohol produce a nivel cerebral en los jóvenes y fueron presentadas las últimas evidencias científicas al respecto. También se analizaron las consecuencias en accidentes de tránsito y la necesidad de realizar intervenciones breves con los usuarios en el sistema de salud para detectar tempranamente el consumo problemático de alcohol en los pacientes.
Alternativas nuevas para un viejo problema
El coordinador del Observatorio Uruguayo de Drogas (OUD) de la Junta Nacional de Drogas, Héctor Suárez, valoró como exitosas estas jornadas en las que se presentaron nuevas alternativas para tratar un viejo problema.
Suárez destacó la creación de la Unidad de Trastornos Relacionados con el Alcohol que funciona en el Hospital de Clínicas, primera alternativa específica de tratamiento, y sostuvo que está establecida en el proyecto de ley y financiada a partir de esa normativa la existencia en cada departamento de una unidad de este tipo, en referencia al proyecto de ley que regula el mercado del alcohol, actualmente a estudio del Parlamento.
Las últimas investigaciones del Observatorio Uruguayo de Drogas de 2011 muestran un alto consumo de alcohol de los uruguayos que alcanza a 75 % del total de la población. El consumo problemático asciende al 23 % de los consumidores, cifras que se mantienen constantes desde el 2001 a la fecha.
Intervenciones breves
Una de las intervenciones más destacadas fue la del consultor de la Organización Mundial de la Salud en materia de políticas de drogas, Thomas Babor, quien planteó la eficacia de las intervenciones breves para detectar tempranamente a quienes padecen problemas por consumo de alcohol.
Para el especialista, se trata de que los médicos dediquen unos pocos minutos a interrogar en su consulta a los pacientes sobre su consumo de alcohol, para detectar los casos de ingesta abusiva y entonces gestionar su derivación temprana a las clínicas especializadas para su tratamiento.
Refiriéndose al aumento del abuso de sustancias en América Latina, destacó como positivo el cambio que se está generando en la región acerca de la necesidad de variar las políticas de penalización del consumo hacia otras con perspectiva de salud pública y derechos humanos, ya que las políticas punitivas han provocado serios efectos secundarios como la sobrepoblación carcelaria.
Babor valoró el camino emprendido por Uruguay de regular estrictamente los mercados del tabaco, alcohol y cannabis, entre otras drogas.
Unidades de tratamiento
El director de la Unidad de Trastornos Relacionados con el Alcohol, Pablo Fielitz, realizó un balance de los primeros diez meses de funcionamiento de este centro que atiende actualmente a 43 pacientes.
Fielitz manifestó que la mayoría son personas de más de 35 años, y llegan con un diagnóstico de dependencia de alcohol severa; más del 40 % padece patología médica asociada al consumo de alcohol ya sea a nivel hepático, neurológico o cardiovascular.
Asimismo, el 60 % de las personas atendidas están en situación de calle y acuden desde los refugios del Ministerio de Desarrollo Social acompañados por los equipos técnicos que acompañan a los pacientes a la consulta como forma de garantizar los tratamientos.
“Hay que tener en cuenta que este es un servicio docente-asistencial y de investigación y que apuntamos en un mediano plazo a convertirnos en un centro de referencia para la formación de recursos humanos”, sostuvo Fielitz.
Los efectos que el consumo de alcohol provoca en la siniestralidad vial fueron abordados por el director de la Unidad Nacional de Seguridad Vial, Gerardo Barrios, quien detalló las medidas adoptadas en los últimos años que permitieron bajar la tasa permitida de consumo de alcohol de 0,8 en 1994 a 0,3 en 2008 mediante la ley 18113, con la intención de pasar a tasa cero en el 2015.
“La disminución de la tasa de alcohol es efectiva y eficaz”, aseguró.
Barrios informó que hay más de 13.000 conductores con la libreta de conducir suspendida por espirometría positiva y planteó la necesidad de que dichos conductores acudan obligatoriamente a una instancia de consulta médica previo a reintegrarles el permiso de conducir.
Ver presentación realizada por Gerardo Barrios en el simposio
Nuevos abordajes en problemática del alcohol privilegian intervenciones breves en usuarios
La combinación del control de la oferta con la reducción de la demanda e intervenciones breves a través del sistema de salud con usuarios problemáticos de alcohol son las armas para controlar esta patología, que en Uruguay afecta a 23 % de los consumidores. Un simposio internacional realizado en Montevideo destacó la tarea de la primera Unidad de Trastornos Relacionados con el Alcohol, que lleva 10 meses de funcionamiento.

En ese contexto, se debatió sobre el daño que el alcohol produce a nivel cerebral en los jóvenes y fueron presentadas las últimas evidencias científicas al respecto. También se analizaron las consecuencias en accidentes de tránsito y la necesidad de realizar intervenciones breves con los usuarios en el sistema de salud para detectar tempranamente el consumo problemático de alcohol en los pacientes.
Alternativas nuevas para un viejo problema
El coordinador del Observatorio Uruguayo de Drogas (OUD) de la Junta Nacional de Drogas, Héctor Suárez, valoró como exitosas estas jornadas en las que se presentaron nuevas alternativas para tratar un viejo problema.
Suárez destacó la creación de la Unidad de Trastornos Relacionados con el Alcohol que funciona en el Hospital de Clínicas, primera alternativa específica de tratamiento, y sostuvo que está establecida en el proyecto de ley y financiada a partir de esa normativa la existencia en cada departamento de una unidad de este tipo, en referencia al proyecto de ley que regula el mercado del alcohol, actualmente a estudio del Parlamento.
Las últimas investigaciones del Observatorio Uruguayo de Drogas de 2011 muestran un alto consumo de alcohol de los uruguayos que alcanza a 75 % del total de la población. El consumo problemático asciende al 23 % de los consumidores, cifras que se mantienen constantes desde el 2001 a la fecha.
Intervenciones breves
Una de las intervenciones más destacadas fue la del consultor de la Organización Mundial de la Salud en materia de políticas de drogas, Thomas Babor, quien planteó la eficacia de las intervenciones breves para detectar tempranamente a quienes padecen problemas por consumo de alcohol.
Para el especialista, se trata de que los médicos dediquen unos pocos minutos a interrogar en su consulta a los pacientes sobre su consumo de alcohol, para detectar los casos de ingesta abusiva y entonces gestionar su derivación temprana a las clínicas especializadas para su tratamiento.
Refiriéndose al aumento del abuso de sustancias en América Latina, destacó como positivo el cambio que se está generando en la región acerca de la necesidad de variar las políticas de penalización del consumo hacia otras con perspectiva de salud pública y derechos humanos, ya que las políticas punitivas han provocado serios efectos secundarios como la sobrepoblación carcelaria.
Babor valoró el camino emprendido por Uruguay de regular estrictamente los mercados del tabaco, alcohol y cannabis, entre otras drogas.
Unidades de tratamiento
El director de la Unidad de Trastornos Relacionados con el Alcohol, Pablo Fielitz, realizó un balance de los primeros diez meses de funcionamiento de este centro que atiende actualmente a 43 pacientes.
Fielitz manifestó que la mayoría son personas de más de 35 años, y llegan con un diagnóstico de dependencia de alcohol severa; más del 40 % padece patología médica asociada al consumo de alcohol ya sea a nivel hepático, neurológico o cardiovascular.
Asimismo, el 60 % de las personas atendidas están en situación de calle y acuden desde los refugios del Ministerio de Desarrollo Social acompañados por los equipos técnicos que acompañan a los pacientes a la consulta como forma de garantizar los tratamientos.
“Hay que tener en cuenta que este es un servicio docente-asistencial y de investigación y que apuntamos en un mediano plazo a convertirnos en un centro de referencia para la formación de recursos humanos”, sostuvo Fielitz.
Los efectos que el consumo de alcohol provoca en la siniestralidad vial fueron abordados por el director de la Unidad Nacional de Seguridad Vial, Gerardo Barrios, quien detalló las medidas adoptadas en los últimos años que permitieron bajar la tasa permitida de consumo de alcohol de 0,8 en 1994 a 0,3 en 2008 mediante la ley 18113, con la intención de pasar a tasa cero en el 2015.
“La disminución de la tasa de alcohol es efectiva y eficaz”, aseguró.
Barrios informó que hay más de 13.000 conductores con la libreta de conducir suspendida por espirometría positiva y planteó la necesidad de que dichos conductores acudan obligatoriamente a una instancia de consulta médica previo a reintegrarles el permiso de conducir.
Ver presentación realizada por Gerardo Barrios en el simposio