“La política fiscal es la más política de todas las políticas económicas de un gobierno”
El ministro de Economía y Finanzas, Fernando Lorenzo, sostuvo que el diseño de una política fiscal y presupuestal sustentable está en la base de la permanencia de los procesos de cambios. Además indicó que las asignaciones presupuestales imbuidas en el proceso político y las evaluaciones de resultados son necesarias, pero conviven con decisiones y preferencias establecidas por la sociedad a través de mayorías democráticas.

Durante el XL Seminario Internacional de Presupuesto Público, desarrollado en el Auditorio Nacional Adela Reta, el titular del Ministerio de Economía y Finanzas afirmó que el Presupuesto explicita la forma en que las “decisiones micro” se articulan para soportar al conjunto de las políticas fiscales.
Lorenzo señaló que sin sustentabilidad fiscal es posible una disrupción en la provisión de los bienes públicos. “La responsabilidad que tenemos quienes trabajamos en el diseño y la ejecución de la política fiscal y, por supuesto, su soporte presupuestal, es de una jerarquía muy importante para el funcionamiento del Estado de Derecho”, explicitó.
Por eso, sostuvo, “la discusión sobre la sustentabilidad de la política fiscal es la discusión sobre la permanencia de todos los procesos de cambio que se están llevando adelante”. Recordó que las crisis en la política fiscal de los países de América Latina están relacionadas con la política financiera, porque los países latinoamericanos tuvieron que recurrir a un tipo de financiamiento externo que impuso fuertes condiciones.
Sobre la evaluación de resultados, Lorenzo estimó que “quien crea que desde los resultados se cambian las asignaciones presupuestales está muy equivocado”. El ministro expresó que la transparencia y la evaluación de resultados son necesarias, pero consideró que la evaluación convive con las decisiones adoptadas por las mayorías democráticas.
Más adelante Lorenzo sostuvo que “una parte sustantiva del gasto público, al menos en nuestro país y me alegro que así sea, lo que hace es producir un tipo de bienes públicos cuya calidad define la eficiencia, pero la eficiencia no va a estar vinculada directamente al gasto, sino a procesos bastante más complejos y sofisticados desde la organización para la provisión de esos bienes”.
Para el titular de Economía y Finanzas, la continuidad del crecimiento dispone al debate sobre los niveles de presión fiscal sobre el producto bruto. “Si la fiscalidad está diseñada solo para acompañar proporcionalmente el nivel de incremento del producto per cápita, tenemos un problema de diseño, porque tarde o temprano nos preguntaremos sobre la necesidad de provisión de bienes públicos y tendremos que realizar reformas integrales de la fiscalidad para alcanzar esos objetivos, cosa que no es tarea fácil”.
“Nosotros hicimos una reforma tributaria que introdujo impuestos que no existían, pero generó una base tributaria directa mucho más importante a tasas progresionales que aseguran que, en la medida que Uruguay siga creciendo y siga con eficiencia en materia de recaudación, va a ampliar la base de recursos públicos para producir más y mejores bienes públicos”.
“En la fiscalidad, en el presupuesto, está la parte de los recursos de una comunidad que se va a dedicar a actividades en las que el financiamiento es definido por la política. Cuánto del producido de un país se dedica a aspectos que ya no forman parte de la decisión individual, sino que forman parte de la discusión colectiva, es el telón de fondo más importante sobre el que se realiza la discusión de política fiscal”, sintetizó.