Políticas de desarrollo rural llegaron a casi 70 % de los productores familiares
El apoyo del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, mediante variadas intervenciones, alcanzó desde 2005 a 15.000 productores familiares. Esa cartera creó un registro, en el cual se inscribieron más de 23.000 unidades de este tipo —aunque se cree que hay 28.000 en Uruguay— y actualizó políticas y planes para resolver las dificultades que atraviesan, como el acceso a créditos.

El titular de la Dirección General de Desarrollo Rural (DGDR) del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), José Olascuaga, se expresó ante los medios de comunicación en la Expo Prado 2014 sobre la realidad de la producción familiar en Uruguay y la incidencia de las políticas públicas desarrolladas para el sector.
En el marco de la anual exposición rural, Olascuaga informó que unas 23.000 unidades familiares son las inscriptas hasta ahora en el Registro de Productores Agropecuarios.
“Pensamos que ese Registro seguirá creciendo, incluso hicimos un ajuste del mismo, teniendo en cuenta que la cantidad estimada de productores familiares son unos 28.000 en todo el país", apuntó.
"Hay una parte importante de ese universo registrada y dentro de ella varios recibieron uno o más apoyos del ministerio”, aseguró.
Para ser considerado productor familiar se deben combinar cuatro características: el tamaño de la explotación, el productor y su familia deben ser la principal mano de obra que se emplea en el establecimiento aunque se manejan ciertos límites de contratación más allá del grupo, la radicación en el predio o en una localidad cercana al mismo es otro de los criterios y, por último, el principal ingreso que tenga el núcleo parental debe ser de la actividad agropecuaria.
En Uruguay, la producción agropecuaria familiar se caracteriza por ser fundamentalmente ganadera y especialmente del rubro lechero.
De los productores registrados, 60 % son ganadero-familiares. “Esto nos diferencia del resto de América Latina", indicó Olascuaga. Hay otro rubro que es importantes como la horticultura.
El 80 % de la producción hortícola del país es abastecida por productores familiares. El área de carne y lana representa 25 % y la lechería 30 %.
“Hay una distribución homogénea en todo el país, con mayor densidad en los departamentos del sur”, sostuvo.
“Esto nos permite tener una mejor idea para el diseño de las políticas y por otro lado nos ayuda a que cuando se destinan recursos al sector efectivamente lleguen a quien es objeto de la política”.
Políticas
Hace ya varios años que desde el MGAP se viene poniendo foco en las características especiales que tienen los productores agropecuarios familiares.
En función de una serie de características y de algunas limitantes que los productores tienen se diseñaron políticas para tratar de sanear esas situaciones. A veces se hace desde el propio MGAP y otras veces en conjunto con otros organismos del Estado, como el Instituto Nacional de Colonización, UTE, OSE y el plan de vivienda rural Mevir, dependiendo de la problemática.
En general estos productores agropecuarios familiares tienen dificultades de escala, su tamaño de explotación es reducido. Hay un trabajo fuerte de Colonización en este sentido.
También tienen dificultades en cuanto al acceso a la asistencia técnica, a tecnologías adecuadas para la producción de acuerdo a esa escala y a esas características. Además de dificultades en el acceso al crédito y posibilidades de financiar planes productivos.
En función de esa realidad se diseñaron algunas propuestas que tienen que ver con apoyar económicamente a los productores para planes de producción y de manejo, para la utilización adecuada de los recursos naturales, para el acceso al agua, a la asistencia técnica.
Otras operaciones buscan generar tecnología más adecuada para la producción familiar. Esto se lleva a cabo con el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA), y operaciones que tienen que ver con proveer algunas formas de crédito más adecuadas para este segmento de la población. “Tenemos una línea muy fuerte de microcrédito rural”.
Asimismo se trabaja para promover el asociativismo entre los productores y reforzar toda la institucionalidad, las organizaciones de productores, las cooperativas, las sociedades de fomento, las ligas de trabajo, los grupos de productores.
“Hicimos una operación en 2013 en la que comprometimos más de ocho millones de dólares para el fortalecimiento de las organizaciones”.
En los planes productivos, en estos últimos cuatro años se comprometieron más de 34 millones de dólares en distintas intervenciones, planes de intervención ovina, de lechería, agroforestales.
Asimismo, informó que este año cuentan con un plan integrado de producción familiar que busca apoyar a los productores familiares independientemente del rubro en el que están trabajando. Actualmente se está en la etapa de recepción de propuestas, hace unos días hubo un primer cierre de recepción, en el cual ingresaron propuestas de unos 1.200 productores.
“Estamos en etapa de evaluación, el cierre final de recepción está previsto para fines de mes. Estimamos que habrá un grado de compromiso económico, de apoyo que rondará los 12 millones de dólares”, indicó.
Desde 2005 se practicaron intervenciones con apoyo a unos 15.000 productores y últimamente, tomando el último período de Gobierno de José Mujica, se apoyó a unos 8.000 más.