Programa Uruguay Trabaja del Mides apoyó la inserción educativa y laboral de 30.000 personas en 10 años
En entrevista con la Secretaría de Comunicación Institucional, la directora nacional de Economía Social e Integración Laboral del Ministerio de Desarrollo Social (Mides), Mariela Fodde, dijo que en el programa socioeducativo-laboral Uruguay Trabaja participaron desde el año 2007 unas 30.000 personas. Este año la inscripción para un cupo de 3.000 se realizará en los primeros días de abril para comenzar a trabajar en mayo.
Fodde aseguró que en setiembre de este año la ley N.º 18240, por la que se creó el programa socioeducativo Uruguay Trabaja con el objetivo de realizar un acompañamiento social para el desarrollo de procesos de integración al mercado laboral, cumple 10 años.
Este programa del Ministerio de Desarrollo Social se creó después de la implementación, entre 2005 y 2007, del Plan de Asistencia Nacional a la Emergencia Social (Panes) y tiene como antecedente el programa Trabajo por Uruguay.
La funcionaria dijo que el programa recibió el año pasado la inscripción de 25.000 personas para un cupo anual de 3.000 en todo el país, donde el 70 % de las que se inscriben son mujeres.
Este año la inscripción se realizará en todo el país en los primeros días de abril para comenzar a trabajar en mayo y terminar en diciembre, destacó Folle.
Desde 2007 han participado 30.000 personas en Uruguay Trabaja. “No es un programa estrictamente de inserción laboral, pero allí se trabajan componentes vinculados a la inserción laboral en forma dependiente o en el área de la economía social relacionado a cooperativas sociales o emprendimientos productivos”, destacó la funcionaria.
En 30 horas semanales y ocho meses de programa se realizan capacitaciones y certificaciones de actividades laborales y educativas por la Universidad del Trabajo del Uruguay (UTU) y también por parte del Ministerio de Educación y Cultura (MEC).
“Los componentes del programa contribuyen a un cambio en la subjetividad de las personas y logran que puedan pararse diferente frente a la vida e insertarse en el mundo del trabajo de distintas formas”, dijo Fodde. Agregó que, en general, los participantes no han tenido oportunidades en su vida y que son desocupados de largo tiempo, y además tienen la educación formal incompleta.
La directora dijo que, por ejemplo, en los meses que dura el programa, sus participantes aprenden trabajando, hecho en el que los integrantes del Sindicato de la Construcción han tenido una gran incidencia, porque enseñan tareas que son de gran valor público y ayudan a la inclusión social.
La directora también hizo referencia a que los grandes logros de Uruguay Trabaja están vinculados a la inserción en cooperativas sociales de sus participantes, lo que se cumple en un 60 %.
Fodde expresó que en 10 años Uruguay Trabaja se adecuó a las diferentes necesidades sociales de la población vulnerable que atiende. En tal sentido, abrió cupos específicos para personas con discapacidad, trans y afrodescendientes.
Entre el 1.º y el 7 de febrero, al llamado de Uruguay Trabaja para población con discapacidad se inscribieron 700 personas, de las cuales corresponde que cumplan tareas 120, un 4 %, según la ley N.º 18651 de protección integral de personas con discapacidad.