Proyecto PROBIO transforma residuos forestales para generar y vender energía
El director de la DINAMA, Jorge Rucks, informó que el Proyecto PROBIO coordina las políticas de aprovechamiento de los residuos de la cadena forestal para el uso energético e incorpora la energía generada a la red eléctrica de forma de diversificar la matriz energética. Indicó que la iniciativa contribuye al intercambio de conocimiento interinstitucional y a la sustitución de combustibles fósiles.

Rucks indicó que el proyecto analiza la dispersión de residuos generadas por las actividades forestales desde una visión ambiental. Dijo que “recibíamos denuncias por parte de poblaciones sobre la acumulación de aserrín de los aserraderos, lo que representaba un problema en el destino final de los residuos”. Sobre ese aspecto acotó que el desafío es utilizar ese residuo para la generación de energía a partir de biomasa.
Remarcó que lo fundamental del proyecto son dos elementos puntuales: “primero la profundización en el conocimiento para generar intercambios en objetivos comunes entre instituciones del Estado de forma que el sector privado aproveche ese desarrollo. Segundo que la generación de energía, a partir de biomasa, genera la sustitución de combustibles fósiles, por lo tanto reducimos las emisiones de gases de efecto invernadero".
Beneficios
El coordinador general de PROBIO, Alfonso Blanco, señaló que "el proyecto tiene grandes beneficios: desde el punto de vista medioambiental facilita la sustitución de energía a partir de combustibles fósiles por una fuente renovable y autóctona del país. Además permite reducir las importaciones de petróleo, al tiempo que contribuye a la estrategia de diversificación de la matriz energética con la incorporación de una fuente renovable como la biomasa generada en el sector forestal industrial”.
Destacó que los primeros proyectos son de cogeneración, lo que significa que la generación de energía se integra a la actividad forestal industrial y se vende el excedente de energía a la red eléctrica. A su vez puntualizó que existen proyectos exclusivos de generación que transforman la biomasa forestal o los residuos de cáscaras de arroz en energía que es comprada por UTE.
En base a eso Blanco afirmó, “la biomasa ocupa una parte importante en la generación de energía pues aquellos proyectos que han logrado ser eficientes se han incorporado a la matriz energética en el orden del 5 % al 8 % del total. Estamos hablando que esos volúmenes son superiores a los de cualquier otra fuente renovable de energía”.
También sostuvo que UTE se encuentra en un proceso de negociación para la incorporación de mayor suministro de energía a la red nacional a partir de biomasa en un futuro próximo, en base a condiciones similares a las establecidas en la última convocatoria realizada (Decreto 367/010)..
Participantes y financiamiento
El proyecto de Producción de Electricidad a partir de Biomasa en Uruguay (PROBIO) es una iniciativa conjunta del Gobierno con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo y es ejecutado por la Dirección Nacional de Medio Ambiente del MVOTMA, la Dirección Nacional de Energía del MIEM y la Dirección General Forestal del MGAP. Este es financiado por el Fondo Global para el Medio Ambiente con una cifra cercana al millón de dólares y una contraparte nacional en el entorno del 20 %. El proyecto operativamente se encuentra vigente desde 2011 y culminará en 2014.
Las plantas en operación que tienen contacto con el proyecto y se encuentran actualmente entregando energía a la red a partir de contratos con UTE y/o en el mercado Spot son ALUR (Artigas), Bioener (Rivera), Energía Renovable (Tacuarembó), Fenirol (Tacuarembó), Galofer (Treinta y Tres), Liderdat (Paysandú), Ponlar (Rivera), UPM (Río Negro) y Weyerhaeuser (Tacuarembó).