Reglamento interno dotará de más institucionalidad al Consejo Superior Tripartito
El Consejo Superior Tripartito, órgano de coordinación y gobernanza de las relaciones laborales, está integrado por trabajadores, Gobierno y empresarios. El 13 de mayo aprobó el reglamento interno que lo dotará de mayor institucionalidad. El ministro interino Loustaunau señaló que cuatro cámaras empresariales votaron a favor, junto al Gobierno y trabajadores, y dos en contra, lo que demuestra democracia dentro de este órgano.

El subsecretario de Trabajo y Seguridad Social, Nelson Loustaunau, informó a la Secretaría de Comunicación que el Consejo Superior Tripartito tiene la coordinación y gobernanza de las relaciones laborales en el país. La ley que crea este consejo (N.º 18.566) establece que este órgano debe tener un reglamento interno, el cual, hasta la fecha, no existía. Por tal motivo, se creó una comisión que trabajó durante dos años en esta reglamentación.
La comisión concluyó su labor y elevó al pleno del Consejo Superior Tripartito un proyecto, en el que fue aprobado el funcionamiento interno. El día lunes 13 de mayo el consejo se reunió y por mayoría aprobó este nuevo reglamento. Los votos a favor provinieron de la delegación de los trabajadores, el Gobierno y, dentro de la delegación de los empleadores, cuatro cámaras votaron a favor del proyecto y dos en contra. Loustaunau explicó que las cámaras que votaron a favor fueron la Cámara de la Construcción, Mercantil, Alimentación y Transporte, mientras que las cámaras de Industria y Comercio votaron en contra.
De todas formas, esta votación llevó a la aprobación del reglamento por la mayoría requerida. A partir de ahora, el Consejo Superior Tripartito contará con una continuidad institucional, lo que le permitirá cumplir con más facilidad sus funciones básicas, entre las que se encuentra la consulta por parte del Poder Ejecutivo para el señalamiento del salario mínimo nacional. Además, este órgano funciona como asesor preceptivo frente a los recursos que se plantean contra las decisiones de la Dirección Nacional de Trabajo al colocar a las empresas dentro de grupos o subgrupos de los Consejos de Salarios.
Loustaunau señaló que la aprobación de este reglamento fue un paso muy importante, ya que el efecto esperado es una mayor democratización de las relaciones laborales existentes en nuestro país.
Respecto a la división de las cámaras empresariales en la votación, explicó que la disidencia no debe llamar la atención ya que da muestra de la fortaleza de nuestro sistema democrático. Agregó que es legítimo que las cámaras tengan posiciones diversas.
También resaltó que quienes votaron en contra tienen 72 horas para fundamentar su voto; no obstante, durante la reunión argumentaron que su voto responde a la coherencia con la queja planteada por ambas contra el Gobierno uruguayo ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT). A juicio del Ministerio de Trabajo, la mayoría conformada demuestra que las cámaras que votaron a favor “pensaron que regular este órgano hace a la construcción de las relaciones laborales y la democratización de las mismas”.