Ministerio de Ambiente

Con la participación del ministro de Industria, Energía y Minería, Omar Paganini, el ministro de Ambiente, Adrián Peña, el Secretario Ejecutivo de OLADE, Alfonso Blanco, el Director Nacional de Energía del MIEM, Fitzgeral Cantero, y el integrante del Departamento de Estudios Urbanos y Planificación (DUSP) del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), Christopher Zegras, se realizó el Primer Foro Internacional de Movilidad Eléctrica.

El evento fue realizado a través de videoconferencia y buscó fundamentalmente exponer los planes con los que Uruguay avanza hacia la segunda transición energética, resaltando la alianza estratégica que conforman el MIEM y el MA para abordar estos desafíos a futuro. Participaron del evento autoridades nacionales e internacionales, miembros del sector académico y de la sociedad civil.

El ministro del MIEM, Omar Paganini, brindó la bienvenida a los participantes y destacó que “Uruguay cuenta con fortalezas en cuanto a la generación eléctrica ya que, gracias a la primera transformación energética, se ha colocado en un lugar de destaque internacional, ocupando el segundo lugar en el mundo en generación eólica, solo detrás de Dinamarca”.

Sin embargo, Paganini subrayó que “aún resta asumir una segunda transformación energética, que apueste a la descarbonización ya que aún el 37% de la matriz energética uruguaya proviene de fuentes fósiles, y el transporte representa las dos terceras partes”. Destacó que el gobierno “se orienta en dos direcciones: el transporte eléctrico basado en baterías, para las distancias cortas y las flotas particulares; y en una segunda etapa, el transporte con base en el hidrógeno verde para carga y larga distancia.

Por su parte, el ministro de Ambiente, Adrián Peña, resaltó en su intervención la importancia de este foro, ya que “estamos urgidos de tomar soluciones sostenibles en todos los ámbitos de la economía y retomar la senda de crecimiento a través de políticas y acciones que contribuyan a la sostenibilidad, tanto social como económica y por supuesto ambiental. En particular es momento de acelerar aquellos procesos que darán una respuesta a la problemática ambiental y climática”.

Destacó también que “Uruguay desarrollará el proceso de elaboración de la segunda NDC, con horizonte a 2030, en la que deberá aumentar su grado de ambición climática respecto a la primera, profundizando sus acciones que contribuyan a la mitigación de emisiones de GEI mientras que nos encontramos elaborando la Estrategia Climática de Largo Plazo (ECLP), otro instrumento establecido en el Acuerdo de París, en donde estableció la meta aspiracional de alcanzar la CO2 neutralidad en 2050, y para esto es imprescindible no solo diseñar e impulsar acciones concretas relativas a la movilidad sostenible, sino generar y mantener el ambiente propicio de políticas, coherente con una trayectoria sostenible en el largo plazo”.

Peña soslayó que “el Ministerio de Ambiente se encuentra apoyando el trabajo del MIEM en proyectos como el Plan Nacional de Adaptación en el sector energético, el proyecto MOVÉS, en la elaboración de una política urbana de movilidad sostenible, en la Comisión técnica para la implementación y seguimiento del subsidio a ómnibus eléctricos, y en el grupo interinstitucional que se enfoca en generar insumos para políticas y proyectos en esta área, sólo para nombrar algunos de los proyectos de trabajo en conjunto”.

Por su parte, Alfonso Blanco de OLADE agradeció la invitación a participar de este foro y felicitó al país por su “integración de las políticas energéticas con sus políticas ambientales” y destacó que “hay una clara señal del rol que tiene el medio ambiente en Uruguay a partir de la creación de un Ministerio de Ambiente, celebrando la capacidad de desarrollar políticas de Estado, tanto a nivel de Energía como a nivel medioambiental”.

Por último, el especialista del MIT Christopher Zegras presentó una serie de estudios internacionales para afirmar que los cambios de modalidad energética requieren de una planificación urbana y estratégica “ya que todo cambio en este sentido afecta a las ciudades y a sus habitantes”.