¿Por qué el Sistema Nacional de Áreas Protegidas se involucra en pesca?

En Uruguay, la actividad pesquera se desarrolla a lo largo de toda la costa, e involucra de forma directa o indirecta a unos 5000 trabajadores.

Pescador

En la actualidad, muchos de los recursos naturales vinculados a esta actividad productiva presentan problemas de conservación por haber sido explotados sobre su límite máximo de aprovechamiento sostenible. A la vez, sus principales hábitats o ambientes para reproducción, cría o alimentación, han sido modificados poniendo en riesgo sus poblaciones. Esta situación incrementa la vulnerabilidad de las personas que se emplean en este sector, tanto a nivel artesanal como industrial, que encuentran en esta actividad su principal fuente de ingresos. 

Desde el Sistema Nacional de Áreas Protegidas se promueven acciones en pos de la conservación de los ecosistemas marinos, incentivando prácticas pesqueras que se ajustan a lineamientos compatibles con la protección de su fauna. De esta manera, se impulsa la conservación de estos sitios que representan una variedad de potenciales recursos para los pescadores. 

Por esto, las áreas protegidas constituyen una de las principales herramientas con enfoque ecosistémico, alineadas a las oportunidades legales e institucionales que propician el desarrollo de la actividad productiva contemplando la multiplicidad de factores para el cuidado de áreas de cría, reproducción y alimentación. 

¿Qué pesca promovemos?

Promovemos una pesca responsable de baja escala, con artes de pesca selectiva, diversificada (enfocada a diferentes especies) que contribuyan a la conservación y, a través del aprovechamiento sostenible de los recursos naturales, mejoren la calidad de vida de los pescadores tanto a nivel local en las áreas protegidas costeras y sus entornos, cómo a nivel nacional en áreas protegidas lejos de la costa.

Prácticas de gestión pesqueras a promover:

  • Incentivar la coordinación entre instituciones.
  • Promover la participación de los actores locales en la toma de decisiones y ámbitos de intercambio entre pescadores, técnicos e instituciones. 
  • Alcanzar un manejo del recurso pesquero con enfoque ecosistémico aplicado a la pesca. 
  • Promover el uso de las guías de buenas prácticas existentes para pescadores artesanales, la guía de pesca responsable de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y la guía para la aplicación del principio precautorio de la FAO.
  • Promover una adecuada gestión ambiental durante las distintas etapas de la actividad productiva (ej.: manejo de residuos)
  • Promover la implementación planes de acción nacional en relación a la reducción de captura incidental de aves marinas y conservación de condrictios (ej.: tiburones y rayas).
  • Generar nuevos planes de acción nacional en relación a otras especies de interés para la conservación como mamíferos marinos y/o tortugas marinas. 
  • Incentivar el cumplimiento de la normativa vigente. 

Prácticas de gestión pesqueras a desestimular:

  • Pesca en zonas prioritarias por su importancia para la conservación de los recursos pesqueros (reproducción, cría, alimentación).
  • Prácticas no acordes a los principios e instrumentos de gestión del área protegida.
  • Captura incidental.

 

Guía práctica sobre enfoque ecosistémico pesquero

Guía práctica para pescadores artesanales

Normativa Áreas Protegidas