Abanderamiento

Capitán de navío Serpa consideró que la sustitución de buques de la Armada es una medida estratégica

En el marco del acto de abanderamiento del ROU 53 "Isla Farallón" de la Armada Nacional, el comandante de la División de Servicios de la Fuerza de Mar de la Armada Nacional, capitán de navío Facundo Serpa, aseguró que “ningún compatriota debería cuestionar la necesidad de una armada moderna, mejor capacitada, profesional y comprometida, así como, que la sustitución de nuestros buques es una medida estratégica”.
Buque de búsqueda y rescate procedente de Alemania adquirido por la Armada Nacional

Serpa expresó que “hace aproximadamente 10 años, todos los partidos políticos que en ese entonces contaban con representación parlamentaria, convenían por unanimidad en la imperiosa necesidad de renovar el equipamiento de nuestra organización, haciendo énfasis en sus medios flotantes”.

Sostuvo que “este hecho, se origina como consecuencia de un fuerte y sostenido requerimiento que de forma cociente y con plena convicción, la armada nacional realizó desde el año 2008, basado en una postura estratégica que entiende imprescindible adoptar, para atender con mayor eficiencia, tanto los nuevos desafíos, como las nuevas y mayores amenazas que van evolucionando en el escenario marítimo regional e internacional”.

Indicó que “es en este sentido, que la política naval 2020-2025 (documento que regula los lineamientos generales que la institución establece para lograr sus objetivos estratégicos navales), define la modernización del equipamiento como uno de los factores preponderantes a alcanzar en el presente quinquenio”.

El capitán recordó que “el señor ministro de Defensa Nacional al comienzo de su gestión en el año 2020 expresaba "estamos al borde de la indefensión como país en dos de las fuerzas, nos parece que la criticidad o la situación límite se puede ver mucho mejor, graficando lo que está pasando en la armada nacional". Bajo este escenario, creo no equivocarme si hoy comparto con ustedes, que ningún compatriota debería cuestionar la necesidad de una Armada moderna, mejor capacitada, profesional y comprometida, así como, que la sustitución de nuestros buques, por encima de ser una necesidad táctica/operacional de relevancia para la propia fuerza en el cumplimiento de su misión, debe ser una medida estratégica de dimensiones invaluables al que nuestro estado no puede renunciar, dirigida a defender la soberanía del espacio marítimo nacional y proteger sus intereses marítimos”, puntualizó.

Agregó que “en esta línea, me permito reforzar el concepto de que actualmente las aguas de jurisdicción nacional, representan el 130% de la superficie terrestre del país y es en ellas, donde se desarrollan un sinfín de actividades comerciales, turísticas y científicas, que promueven la economía nacional, generando ingresos y fuente de trabajo para muchos de nuestros ciudadanos”.

“con el devenir de los años, atrás quedaron aquellas páginas de nuestra historia escritas con grandeza por nobles buques, los cuales vetustos y fatigados superaron excesivamente las expectativas naturales en cuanto a la proyección de su vida útil, dejando bien en alto nuestro hermoso Pabellón Nacional y nuestra querida bandera de la Armada, en cada una de las misiones que han cumplido y de manera exitosa”, precisó.

Serpa agregó que “en la misma línea, otras embarcaciones, no menos antiguas y cansadas, navegan su última singladura, donde, en un futuro no muy lejano, darán cabos a muelle por última vez, pero con la satisfacción, sin lugar a dudas, del deber cumplido”.

“Al igual que en otros momentos de nuestra larga y rica historia, este último lustro marca otro crucial punto de inflexión para la marina y el comando de las fuerzas de mar particularmente, en donde nuevos vientos comenzaron a soplar para todos nosotros y un nuevo libro de bitácora empezó a escribirse con la tan anhelada renovación de las unidades de superficie”, agregó.

Recordó que “este ciclo se inició en el año 2018 con la incorporación de dos lanchas para tareas de búsqueda y rescate en el mar, ambas de procedencia Alemana, la ROU “Isla de Flores” y ROU 52 “Isla de Lobos”, buques que hoy se encuentran atracados aquí frente a todos ustedes. Prosiguió en el año 2022, con la incorporación de tres guardacostas clase “Protector”, procedentes de los Estados Unidos de América, buques que desde su arribo son destinados en apoyo al control de nuestras húmedas a lo largo del Río Uruguay, así como a contribuir en las tareas de fronteras, y de búsqueda y rescate en el área del Río de la Plata”, advirtió.

Agregó que “en el presente año, nuevas hojas de este libro continúan escribiéndose, prueba fehaciente de ello, son las gestiones que se vienen llevando adelante para concretar la incorporación de una lancha de patrulla clase "Chamurra" perteneciente a la Armada de Corea del Sur, un buque de investigación científica de origen Norte Americano y la adquisición de dos buques de patrulla oceánica OPV”.

Con respecto al ROU 53 “Isla Farallon” que se incorpora a la Armada, explicó que es un buque de 27,5 mt de eslora, 6,53 mt de manga y 2,1 mt de calado máximo, desplaza 103 ton, su casco está construido de aluminio, tiene 3 motores principales, cada uno con su línea de eje y hélice correspondiente y desarrolla una velocidad máxima de diseño de 23 nudos.

Este nuevo medio, tendrá como misión principal, la tarea de búsqueda y rescate en el mar, particularmente en el área del frente marítimo, teniendo como puerto madre para ello, esta base Naval.

“Esta situación, representa una oportunidad que como institución debemos aprovechar, con la finalidad de redesplegar nuestras plataformas navales destinadas a tal fin, de forma de continuar desempeñando una de las tareas más relevante, noble y solidaria que atendemos como país, de manera más eficiente y adecuada a lo largo de toda la franja costera rioplatense y oceánica”, subrayó.

 

Etiquetas