Firma de convenio

Defensa y Acau formalizan la facilitación de locaciones militares para producción audiovisual

Las autoridades del Ministerio de Defensa Nacional y la Agencia del Cine y Audiovisual del Uruguay (Acau), suscribieron este miércoles un convenio para formalizar un marco de cooperación institucional para promover y facilitar el uso de las locaciones del Ministerio de Defensa, para la realización de producciones audiovisuales, siempre que ello no afecte el contenido esencial ni la capacidad operativa de las Fuerzas Armadas.
Ministro Javier García y presidente de Acau, Facundo Ponce de León firmando convenio

La documentación fue firmada por el ministro de Defensa, Javier García, y el presidente de la Acau, Facundo Ponce de León.

El ministro García dijo que este convenio significa «formalizar, porque, de hecho, en otras oportunidades se usaron locaciones del Ministerio de Defensa, creo que una de las más recientes es la de Netflix, la serie de Havelange y seguramente hay otras. Una de las modificaciones que nosotros quisimos imprimir, que quisimos hacer en el ministerio es tratar que los procesos sean formales y regulares. No porque no hacerlos con formalidades termine en irregularidades, todos lo sabemos. Sino que todo tiene una formalidad para garantía de todo el mundo», aclaró.

Agregó que «entonces, los convenios que antes se hacían por intermedio de las Fuerzas Armadas en particular, dijimos, vamos a hacerlo centralmente y, aparte cuando hay fondos, tienen que pasar por un Tribunal de Cuentas porque en definitiva son fondos públicos y todos tenemos que estar tranquilos, quienes los ponen y quienes los administramos de que están bien administrados de acuerdo a la ley».

Indicó que «eso habitualmente no se hacía porque seguramente es mucho más ágil que lo otro, pero da mucha más tranquilidad hacerlo de acuerdo a la ley y la verdad que en el Tribunal de Cuentas encontramos siempre procesos que se aceleran bastante, que nos permitieron que no se retrasaran las cosas por temas burocráticos», precisó.

Los bienes públicos

Recordó que «algo que decía estos días, justo cuando estábamos en Casavalle antes de ayer, en el centro de referencia, que eran dos batallones de Ingenieros del Ejército que se relocalizaron en Carrasco, en la brigada de Ingenieros, al lado del aeropuerto, y se traspasaron para el Ministerio de Desarrollo Social».

«Uno está acostumbrado a decir ‘era un predio del Ejército’, podría ser un predio del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, no importa. Pero estamos acostumbrados a nivel Estado, que los bienes públicos son de quienes los administramos, y los bienes públicos no son de quienes los administramos, los bienes públicos son de la gente que, momentáneamente, Facundo, quien habla, las Fuerzas Armadas en otro caso y, por lo tanto, lo que tenemos que tratar es que los bienes públicos sean bien utilizados, que sean productivos, que tengan una utilidad para la gente», subrayó.

Agregó que «si hay predios que no tienen sentido porque no están sacándole el jugo necesario para la gente que pasen a otra entidad que los pueda volver a la sociedad con mejor forma, ahí estuvo lo de Casavalle. O, ayer de mañana, por ejemplo, estábamos en Paysandú e hicimos un comodato con la Intendencia de Paysandú, un predio que hacía más de 50 años que estaba así, cerquita del puente de Paysandú-Colón lo había pasado al Ministerio de Transporte y Obras Públicas en la década del 70 al Ministerio de Defensa y nunca había tenido utilidad, entre otras cosas porque es un gran pozo, y la Intendencia de Paysandú quería hacer un polideportivo en el barrio norte de la capital, y bueno, no lo necesitamos nosotros, lo necesitan ustedes, tómenlo», sostuvo el ministro.

Indicó que «en este caso en particular es muy similar porque es utilizar locaciones que muchas tienen una riqueza patrimonial muy importante. Todos conocemos la Escuela Militar de Toledo, es una belleza hecha por Dieste que tuvo otros fines, era un seminario. Y cuántas riquezas hay, uno va a Santa Clara y en el cuartel de Santa Clara hay un museo de Juana de Ibarborou que vivía enfrente a Santa Clara, tenía una casa».

«Y así sucesivamente, las riquezas que tienen las Fuerzas Armadas, entonces, qué bueno que eso se pueda potenciar aparte para la sociedad, a partir de la cultura. Que es un derecho que tienen todos los habitantes, poder acceder a la cultura, poder potenciar los bienes culturales, patrimoniales. Por eso, este acuerdo formaliza, regulariza, pero también trata de potenciar esa posibilidad con una visión de futuro, de hacer un reconocimiento, una vez más, a nuestras Fuerzas Armadas y como las FF.AA. en sus misiones esenciales, fundamentales, tienen una vinculación muy cercana con la sociedad en distintos ámbitos, y en el de la cultura también», aseguró.

Recordó que «el año pasado hicimos una gira artística con las bandas de las fuerzas por distintos espacios públicos de Montevideo. Tenemos brutales artistas que expresan dentro de las fuerzas su arte, porque los fines de semana tocan en alguna banda y dentro de la fuerza hay gente que toca la trompeta, hay cosas para explotar. Esta es una forma más de unir a las fuerzas, al Ministerio de Defensa con la sociedad a través de la cultura, y cierro con esto, de una industria que Uruguay está desarrollando fantásticamente que es la industria del cine que es trabajo. Cuántos empleos desde el punto de vista técnico, que participa detrás de cámaras, maquilladores, productores, cámaras, y Uruguay está abriéndose a eso entonces queremos participar también en esto. Quizás podemos festejar un Oscar dentro de poco», sostuvo el ministro.

Proceso enriquecedor

Ponce de León, en tanto, agradeció al ministro Javier García, «también a Carolina Pejo y a todo el equipo de Jurídica del ministerio por haber comprendido lo que vinimos a plantear. El Ministerio de Defensa tiene un cometido y tiene una esencia en todas sus instalaciones que tienen su razón de ser. El Ministerio tiene desplegado en todo el territorio nacional una serie de instalaciones que son esenciales a su cometido, pero al mismo tiempo, tiene desplegado en todo el territorio nacional una serie de instalaciones que habilitan a la imaginación de las personas que crean contenidos audiovisuales, entonces, la Escuela Naval puede ser el hospital donde llegaron los sobrevivientes de los Andes como ustedes saben que así fue. Y el viejo aeropuerto puede ser el lugar donde Ayrton Sena ganó el primer gran premio como fue el año pasado el viejo aeropuerto haciendo el circuito de Mónaco», ejemplificó.

Explicó que «esa tarea que hacen los creadores en realidad en un sentido técnico los locacionistas que son personas que recorren el mundo buscando lugares donde firmar historias, es una tarea esencial, y requería de parte del ministerio y de la agencia, un esfuerzo coordinado, porque también el mundo audiovisual se mueve con una cierta celeridad, pero también, hay que respetar ciertos procesos. Y esa fue la conversación que iniciamos con el ministerio, desde la agencia, con Locaciones Montevideo que también es un actor fundamental porque muchos de estos lugares están en la capital o en otros departamentos, y es una conversación que este convenio de cooperación que firmamos lo que dice es queremos hacerlo de la manera más ágil y más formal posible tratando todas las garantías que hay que respetar, pero, habilitando que el Uruguay entiende que la creación de contenidos audiovisuales y el crecimiento de esta historia que es también el crecimiento de nuestra cultura y de nuestra cinematografía es esencial también para el país», señaló.

Indicó que «entonces, lo que buscamos con esto y, por suerte, antes de la inminente partida del ministro pudimos formalizar, es que vamos a trabajar de común acuerdo con el ministerio, desde la agencia, con las intendencias, con Locaciones Montevideo, para encontrar las mejores maneras de ir rápido en esta búsqueda de personas que encuentran en vuestros espacios lugares donde contar historias que nos hagan crecer, pensar, emocionar, divertir, lo que busca también de alguna manera cualquier manifestación cultural. Así que, desde la Agencia, muy agradecidos con el proceso, fue un proceso enriquecedor para los que no somos juristas, aprendimos de los detalles, de los incisos, de los numerales y de todas esas cosas que parecen detalles, pero son los que cuando están bien hechos facilitan todo el trabajo que viene después», concluyó.

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