Ministerio de Defensa Nacional

El ministro García participó del acto convocado por el Instituto Antártico Uruguayo, en que se conmemoró los 30 años de de la primea misión naval antártica  a bordo del buque Pedro Campbell.

En el acto estuvieron presentes el presidente del Instituto Antártico Brigadier Fernando Colina, el subsecretario de Defensa Cnel. (R) Rivera Elgue, el presidente del Correo Cnel. (R) Rafael Navarrine, el ex presidente Luis Alberto Lacalle y el capitán de navío (r) Julio Dodino.

También estuvieron presentes el jefe del Estado Mayor de la Defensa, Gral. de Ejército Gustavo Fajardo y los comandantes en jefe del Ejército Gral. Gerardo Fregossi del a Armada almirante Jorge Wilson y de la Fuerza Aérea Gral. del aire Luis de León.

Durante el acto, el ministro García dijo «que al doctor Lacalle le gusta usar un verbo que es un verbo irregular que es «amojonar». Bueno, yo creo que este mojón que se recuerda hoy es un hito muy importante desde el punto de vista nacional. Desde el punto de vista de las Fuerzas Armadas es el dibujo de un cierre de trabajo conjunto porque la verdad que es con la presencia de la Armada Nacional en ese viaje del Campbell, se cierra un ciclo donde las tres fuerzas, Ejército, Fuerza Aérea y Armada participan de una tarea, de una misión nacional que hasta el día de hoy perdure, y pretendemos que así lo sea, por muchísimos años más».

Sostuvo que «estar en la Antártida es una decisión, desde el punto de vista geopolítico, de las que tienen más magnitud para nuestra nación, porque estamos allí en esa porción del mundo donde muy pocos están, donde para estar hubo que trabajar muchísimo, porque nadie regala nada en este mundo tan competitivo, y mucho más hay que trabajar países como el nuestro que estamos acostumbrados a abrirnos a los codazos entre los grandes y aquellos que tienen más poder que nosotros de todo punto de vista». 

Agregó que «hay que destacar la continuidad y el liderazgo que se tuvo, para estar en un lugar donde todos los gobiernos de todos los signos políticos del país, han preservado y cuidado. Y han entendido como cosa propia, como bien nacional. Y esto me parece que es una característica bien propia de los orientales: el saber cuidar aquellos ámbitos que deben estar libres de las disputas conyunturales y que hacen a la perennidad y una mirada de mediano y de largo plazo».

Destacó también «la importancia de estar en pie de igualdad en este club, como decía, con otras potencias, que nos abre puertas en otros terrenos, porque la diplomacia antártica nos permite abrir contactos, relaciones en una comunidad que sacada de la Antártida y puesta en el concierto de las naciones, tienen un poderío muy importante. Estar allí compartiendo con estos países en pie de igualdad, porque si hay un lugar en el mundo que se está en pie de igualdad, es allí. Tener la capacidad de a partir de esta presencia, proyectarnos en otros ámbitos me parece que es un dato que al Uruguay, fuera de lo que significa la comunidad antártica le interesa como país, como nación».

El ministro dijo luego que «a veces, particularmente, hay gente que ve enfrentados: el mundo de la ciencia, la Universidad de la República, el personal militar. Hay gente que a veces ve como enfrentados, como antagónicos. Y no hay lugar donde se exprese más la comunidad de intereses en virtud del interés nacional donde cualquier tipo de diferencia se super, justamente para priorizar lo que nos define como nación y lo que nos interesa como nación, es en la comunidad antártica».

Agregó que «científicos, y las nuevas generaciones, las que continúan ahora, científicos que trabajan en la facultad de Ciencias de la Universidad de la República, que tienen allí sus proyectos de investigación, que lo hacen en virtud de que es un ámbito donde está presente el Uruguay. Pero como también me dijo un científico muy relevante hace pocas semanas atrás, porque las Fuerzas Armadas nos dan todas las condiciones para que podamos trabajar y estar allí. A nadie se le pasaría por la cabeza que pueda estar el mundo científico sin la  capacidad logística de traslado, de custodia que hacen nuestras Fuerzas Armadas».

«Y algo que se sabe poco: la inversión que hace el Ministerio de Defensa y las Fuerzas Armadas para la presencia del mundo científico. El año pasado si no hubiera sido por la capacidad de inversión que tuvieron las Fuerzas Armadas en tener las plataformas que tenemos, los Hércules, que cruzaron por primera vez en la historia, sin hacer escala, en Punta Arenas, no hubiéramos podido estar. Se hizo por una inversión del país, a través del Ministerio de Defensa, en este caso de la Fuerza Aérea que nos permitió ejercer la soberanía. De otra forma no hubiéramos podido estar. Un vuelo histórico: en 21 horas de vuelo, fuimos y volvimos, dejamos a los científicos, hicimos el aporte de suministros, y volvimos a repetir esa tarea pocas semanas después. El traslado de cada científico, que lo hacemos porque es de interés para todos hacerlo, el traslado obviamente tiene sus costos su mantenimiento y eso corre por cuenta de esta parte del Estado-Nación que es el ministerio de Defensa y las Fuerzas Armadas. Y el trabajo que hacen los científicos, que le aportan muchísimo al país, redunda en un beneficio para todos, también para quienes trabajamos en esta dependencia del Estado», subrayó el ministro.