Mesa de diálogo sobre productividad

Murro: Uruguay “tiene enormes fortalezas para seguirse desarrollando (...) y eso no es casualidad, es un producto histórico y de políticas que se han venido desarrollando”
El ministro de Trabajo y Seguridad Social, Ernesto Murro, expuso la Mesa de Diálogo Políticas para la Productividad y Empleo en Uruguay, organizada por la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), y el Consejo Iberoamericano para la Productividad y Competitividad (CIPC).

El ministro Murro participó de una mesa de diálogo integrada por representantes del sector empresarial, de los trabajadores, especialistas y autoridades, entre ellos el director de OPP, Álvaro García y el presidente del CIPC, Enrique V. Iglesias.

“Nosotros vamos a dar algún comentario, alguna opinión en tono de reflexión más que de conclusión. Creo que ante estos cambios importantes que se están dando en el mundo y en nuestro país, tenemos que ayudar a una reflexión sincera”, comenzó señalando el ministro.

“Estamos en un mundo que está yendo hacia la derecha, y yo creo que eso es peligroso para el desarrollo del mundo”, expresó.

“Cuando hablo de desarrollo hablo de cómo le va a ir a las grandes mayorías, y también de cómo le va a ir a los empresarios en serio, a los empresarios honestos, responsables y emprendedores”, añadió el jerarca.

En este sentido, recordó que desde el Poder Ejecutivo y en particular, desde el Ministerio de Trabajo, se ha definido como estrategia fundamental para este período de gobierno la Cultura del Trabajo para el Desarrollo, que es además una de las 10 estrategias del Gobierno Nacional, e incluye expresamente el tema de la productividad, entre otros.

“¿Por qué creemos que este es un tema fundamental? Porque creemos que Uruguay ha  perdido cultura del trabajo, y para que el país se siga desarrollando necesitamos mejorar esa cultura del trabajo, eso es tener mejores trabajadores, mejores empresarios, gobernantes, mejores todo”, explicó Murro.

El jerarca añadió que el país “tiene enormes fortalezas para seguirse desarrollando” y en este sentido recordó que aparece en los primeros lugares en casi todos los indicadores comparado con América Latina, “y eso no es casualidad, es un producto histórico y de políticas que se han venido desarrollando”.

Por otra parte, el ministro aclaró que “no queremos desarrollarnos de cualquier manera, queremos desarrollarnos con justicia social, con calidad, con desarrollo tecnológico, con desarrollo empresarial, con redistribución de la riqueza” y para ello es necesario mejorar “nuestra cultura del trabajo”.

En cuanto a la productividad, comentó que el año pasado se comenzó a abordar este tema junto a varios sectores y organismos. En tal sentido recordó el informe del Banco Mundial donde se señala que, de la década donde el país tuvo un crecimiento del 5%, la mitad aproximadamente de dicho crecimiento se debió a la productividad.

Una de las mayores dificultades, dijo, es la falta de información respecto a qué han hecho las empresas en cuanto a productividad.

“La productividad necesita entre otras cosas imprescindiblemente de un mayor acceso a la información, para conocerla y para desarrollarla”, expresó.

Otra fortaleza, según el jerarca, es el cambio cultural. “Hoy en Uruguay se puede hablar de productividad con mas aceptación. Hasta hace algunos años la palabra productividad para algunos sectores de la izquierda y del movimiento sindical era mala palabra”, comentó.

A continuación discurso completo del ministro de Trabajo y Seguridad Social, Ernesto Murro:

En nuestra opinión, yo creo que estamos en un mundo que va hacia la derecha y que eso es peligroso para el desarrollo del mundo. Me preocupan algunas cosas que están sucediendo, cuando hablo del desarrollo estoy hablando de cómo les va a ir a las grandes mayorías y también cómo les va a ir a los empresarios honestos, responsables, a los empresarios emprendedores que necesitamos para seguir desarrollando el mundo. Y en ese proceso nos atrevemos a identificar algunas cosas que están pasando, por ejemplo la movilidad que el mundo tiene. Hoy tenemos una mayor movilidad social, mayor movilidad territorial, mayor movilidad familiar, y eso es un dato, en nuestra opinión, importante de las nuevas realidades. Antes la gente vivía más tiempo en un mismo lugar, trabajaba más tiempo en una misma empresa, en un mismo territorio, había también menor movilidad social, y creo que ese es un dato. El otro dato es el inmediatismo, hay una cuestión de que quiero todo ya, y eso creo que también lo debemos tener en cuenta, asociado a otra característica que es el consumismo, que nos determina muchas cosas en el acontecer. Un aumento importante de la frivolidad y del individualismo. Un aumento importante de la diversidad, en todos los sentidos. Aparecen nuevas organizaciones gremiales empresariales y de trabajadores, para no hablar de otras de las diversidades que nos aparecen. Y creo que tenemos una necesidad de mayor sinceramiento y de menor politiquerización en el análisis. Porque hoy parecería que cualquier cosa que decimos tenemos poca responsabilidad, no solamente en las redes sociales sino también en que cualquier cosa puede ser dicha y usada en uno u otro sentido políticamente. En ese proceso, nosotros, desde el Poder Ejecutivo y en particular desde el MTSS hemos definido que la estrategia fundamental para este período de gobierno y una de las diez estrategias del Gobierno Nacional es la Cultura del Trabajo para el Desarrollo, que incluye expresamente el tema de la productividad, entre otros. Porque nosotros hablamos de que creemos que este es un tema fundamental, ha habido una muy buena respuesta del sector empresarial, de los trabajadores, de la academia, de las organizaciones nacionales e internacionales porque creemos que Uruguay ha perdido cultura del trabajo, y que para que Uruguay se siga desarrollando necesitamos mejorar esa cultura del trabajo, y eso es mejores trabajadores, mejores empresarios, mejores gobernantes, mejores todos, porque creemos que, en este proceso, este país que tiene enormes fortalezas para seguirse desarrollando, Uruguay aparece en los primeros lugares de casi todos los indicadores, comparado con América Latina, y eso no es casualidad, es un producto histórico y es un producto de políticas que se han venido desarrollando. Y creo que para seguirnos desarrollando con justicia social, con calidad, con desarrollo tecnológico, con desarrollo empresarial, con la distribución de la riqueza, necesitamos mejorar nuestra cultura del trabajo. Los trabajadores deben mejorar y los empresarios también. Tenemos carencias en el empresariado nacional, sin perjuicio de que también tenemos muy buenos empresarios. Esto implica, en nuestra opinión, la gestión empresarial, la responsabilidad empresarial, la formación empresarial, al igual que lo de los trabajadores. Por qué lo planteamos con esta fuerza en nuestra opinión como una reflexión más? Porque no es casual que Uruguay por tercer año consecutivo esté primero en inclusión social y fundamentalmente eso es por empleo formal. Somos el país más formalizado de América Latina, hemos incluido más de 500.000 personas en la seguridad social en el país de población estable en doce años. Tenemos el país de menor pobreza y de mayor clase media, y el alto desarrollo digital, que es importantísimo, y el alto desarrollo en democracia y en baja corrupción y en transparencia. Y creo que a partir de eso tenemos que ver algunas cuestiones, entre ellas la productividad. Empezamos, el año pasado, junto a otros sectores y a otros organismos, a conversar el tema de productividad. El Banco Mundial a principios de este año publica un informe de la década esa que crecimos un 5 % promedio aproximadamente la mitad se debió a mejoras de productividad. Esta mejoró de forma importante en Uruguay, es una fortaleza que tenemos, pero hay que mejorar mucho más. Cuando quisimos empezar a conversar en una de las iniciativas, que fue la que lanzamos en el ministerio, el primer problema que nos encontramos es que las empresas que han hecho algo no quieren informarlo. Logramos traer algún experto, junto con la Unión de Exportadores acá presente, con la CAF, con la OIT, con el BID, con CEPAL y logramos solamente una empresa privada y una empresa pública que nos explicara, a un grupo cerrado como este, qué había hecho en productividad. Por tanto ahí tenemos un problema. La productividad necesita imprescindiblemente un mejor acceso a la información para conocerla y desarrollarla. Hicimos varias actividades en el correr del año pasado y este año. Creo que en esto tenemos otra fortaleza que es el cambio cultural en torno al tema productividad. Hoy en Uruguay se puede hablar de productividad con más aceptación. Hasta hace algunos años la palabra productividad para algunos sectores de la izquierda y del movimiento sindical era mala palabra.
Creemos también que paralelamente a esto tenemos que hablar de otras cosas. Es un avance la ley de competitividad y transformación productiva, que lamentablemente no contó con todos los partidos apoyándola, y creo que eso es un ejemplo de eso que hablábamos hoy de que algunas cosas buenas se politiquerizan, porque lamentablemente no la aprobaron todos los partidos. Y en estos mismos días todos los partidos han aprobado otras cosas que después hay que reconsiderar, otros proyectos de ley que están en proceso. Junto a esto tenemos que poner arriba de la mesa algunos otros temas, por ejemplo los acuerdos comerciales. Pensamos que Uruguay, para pequeño país, que somos los que somos, que vamos a seguir siendo tres millones y pico, necesita fuertemente una inserción internacional. Nosotros no queremos cualquier acuerdo comercial, queremos acuerdos comerciales con cláusulas laborales y sociales, y también en eso hemos empezado a trabajar, y creo que en eso también hay que avanzar sensiblemente. Creo que otro tema que tenemos que abordar son las cadenas de valor o de suministro de producción. El mundo está en eso y Uruguay está en eso. Tenemos en Uruguay importantes empresas que están integradas a los procesos y hay importantes empresas que no están integradas a los procesos, y sobre todo tenemos que hacer un esfuerzo para que las micro, pequeñas y medianas empresas integren a estos procesos, que son la inmensa mayoría de las empresas de nuestro país, y que para eso también se necesita mejora en la formación empresarial para que puedan participar de estos procesos. He tenido que aprender en estos meses que ni siquiera los airbags de los autos se fabrican en un solo lugar, todavía en el país no hemos aprendido que esta es una realidad en la cadena de valores de suministro que tenemos que ver cómo, en todos los aspectos, productivos, tecnológicos, de relaciones laborales, de competitividad, de inserción internacional. Lo importante es partir de la base que nosotros somos un gobierno que queremos un desarrollo, como ya lo dijimos, no cualquier desarrollo. Queremos desarrollo con justicia social, con desarrollo de las tecnologías, con desarrollo empresarial, con negociación colectiva y con un sistema de protección social. Hay países en nuestra región que están creciendo sin estas cosas. Nosotros no queremos ese crecimiento, y eso tiene que quedar absolutamente claro. Me preocupa mucho que Colombia de 20 millones de trabajadores se va a jubilar 1 millón. En Chile, la mitad de las mujeres jubiladas hoy cobran 65 dólares por mes; la mitad de los hombres jubilados hoy cobra 170 dólares por mes. Nosotros no queremos eso. En México, de 120 millones de habitantes hay solo 4 millones de jubilados. Nosotros queremos un desarrollo con el crecimiento que hemos tenido y ojalá que podamos volver a mejorar y con fuerte desarrollo empresarial, pero lo queremos con justicia social, con negociación colectiva y con sistema de protección social, y la experiencia de estos últimos doce años demuestra que es posible, y también nos demuestra los otros ejemplos de países que crecieron y empeoraron sus indicadores. Por último, creo que hay otro desafío que es el mejoramiento de la superación de las brechas. En Uruguay, los que somos más viejos vivíamos en un país donde los centros de actividad estaban en la zona metropolitana, y eso cambió, hoy tenemos grandes centros de actividad en todo el país, y va a seguir siendo así. Y hemos mejorado en algunas cosas: hoy tenemos 15 centros universitarios en el interior del país. Cuando fuimos a inaugurar la UTEC en Fray Bentos, nos encontramos que en Fray Bentos habían estudiantes de Montevideo y de varias zonas del país. Y esa UTEC está financiada por una empresa importantísima y por un país importantísimo, por UMP y por China. Yo creo que es un buen ejemplo de una universidad pública tecnológica, pero sin duda que todo ese crecimiento que está teniendo el interior del país, pese a las mejoras, no lo estamos todavía acompañando suficientemente con otros desarrollos. Las cámaras empresariales son fundamentalmente montevideanas y los sindicatos son fundamentalmente montevideanos. Este es un ejemplo de en qué cosas tenemos que disminuir brechas, porque cuando tenemos que las plantas de celulosa están en el interior, que las principales industrias frigoríficas están en el interior, y algunas de altísimo desarrollo tecnológico, otras industrias están en el interior y pese a los avances no hemos acompañado esa descentralización, y yo creo que ahí tenemos otra brecha que seguir disminuyendo para ese desarrollo. Por tanto, ese tema y el medioambiental, que está siendo creciente y que creo que en eso Uruguay, a partir de lo que ha sido su evolución histórica y su reciente intensificación de la preocupación por el clima, tema en el cual tenemos que seguir avanzando en el conjunto de estas opiniones y seguramente las que los distinguidos importantes participantes van a hacer, nosotros pensamos que hay que seguir reflexionando.