MTSS gestiona prórrogas de seguro de desempleo en varias empresas con dificultades, informó Di Doménico

Di Doménico detalló que varios expedientes, como los de FRICASA (Frigorífico Casa Blanca de Paysandú) y Bamidal (Paso de los Toros, Tacuarembó), que comprenden a 303 y 62 trabajadores, respectivamente, presentaron demoras debido a la falta de documentación básica legal exigida. “La demora se debió a falta de documentación y no porque se les iba a negar o porque hubiera atrasos en la gestión”, aclaró.
En cuanto a DIROX (industria química de San José), con 54 trabajadores en esta situación, señaló que la empresa “viene con el régimen especial desde hace más de dos años” y que, por esa razón, “existirían beneficiarios cuyos datos no figuran en los reportes habituales del Banco de Previsión Social (BPS)”. “La falta de precisión en la solicitud del subsidio genera dificultades administrativas, no obstante, los funcionarios de la DINASS están procesándolo”.
Sobre los 18 trabajadores de la metalúrgica Schellenberg, indicó que se trabaja en conjunto con el sindicato para obtener la información faltante, dado que la empresa no ha comparecido, lo cual “nos ha impulsado a contactar a los representantes de los trabajadores para encauzar debidamente el proceso de cobertura”.
En otros casos, como el de la empresa STILER —subcontratada en la obra de ampliación de la Terminal Cuenca del Plata—, con 151 trabajadores en esta condición, las dificultades se vinculan a la fundamentación técnica y a la integración de nóminas con los consentimientos de los trabajadores. “El uso del subsidio por desempleo se vincula a un contencioso comercial entre la empresa contratista y STILLER que tiene parada la obra”.
El director también manifestó su preocupación por la situación de empresas de la industria frigorífica como Rondatel (Rosario, Colonia) y Lorsinal (Montevideo), cuyos 503 trabajadores agotaron la última prórroga legal del subsidio y actualmente se encuentran sin cobertura. “Estamos muy preocupados porque los accionistas de estos frigoríficos, que pertenecen a un grupo económico extranjero, no dan muestras fehacientes de capitalizar los emprendimientos y ponerlos en marcha”, advirtió.
En el caso de CALCAR (Tarariras, Colonia), que comprende a 120 trabajadores, sostuvo que el MTSS trabaja desde el 14 de julio para obtener de la sindicatura los documentos necesarios, lo que se dificulta por la continuidad parcial de actividades bajo otra empresa. “Cuando no aparece clara la figura del empleador tenemos dificultad para cumplir con el deber legal de iniciar el proceso. Si existe la figura del empleador o, como en este caso, un representante del Poder Judicial debe acompañar los procesos administrativos del subsidio”, explicó.
Di Doménico insistió en que, sin perjuicio de las facultades francas y amplias que la ley le otorga al Ministerio para gestionar estos procesos, la eficacia, la eficiencia y la transparencia en la aplicación de recursos públicos en estos subsidios, el buen fin y la rapidez en la gestión de los mismos dependen de la presentación completa de los requisitos exigidos.
El jerarca recordó que la normativa establece claramente los documentos necesarios y que estos se encuentran publicados en la página web del MTSS. “Hay una falsa interpretación de la norma en cuanto a que nosotros tenemos que ir pidiéndolos gradualmente. No es así. Si no se tiene todo, el trámite pierde eficacia”, concluyó.