Reconocimiento de los derechos de los trabajadores domésticos
Reconocimiento de los derechos de los trabajadores domésticos
El Plenario de la OIT resolvió en el día de ayer promover la adopción de un Convenio, acompañado de una recomendación, que establezca el reconocimiento de los derechos de las y los trabajadores domésticos.
OIT resolvió promover adopción de Convenio
La comisión de trabajadores domésticos celebró su primera sesión el día 2 de junio de 2010. Originalmente se conformó por 181 miembros (85 miembros gubernamentales, 32 miembros empleadores y 64 miembros trabajadores), siendo presidida por la señora L. Trasmonte, representante del gobierno de Filipinas, y como vicepresidente por el señor K. Raham, miembro del sector empleador de Bangladesh.
El representante del Gobierno de Uruguay, subsecretario del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, Nelson Loustaunau, destacó, sobre la base de la experiencia del país en relación con la protección de los trabajadores domésticos, que las leyes de protección de estos trabajadores no tuvieron un impacto negativo en los niveles de empleo dado que el mismo continua estable a nivel nacional.
Loustaunau subrayó la importancia del diálogo social y señaló que los principios y derechos fundamentales en el trabajo debían tenerse en cuenta, en particular la libertad sindical y de asociación y el derecho de negociación colectiva. Los convenios colectivos para los trabajadores domésticos contribuyeron sustancialmente a la mejora de los niveles de formalidad de los trabajadores.
El subsecretario manifestó que "de hecho el 50% de los trabajadores domésticos formaban parte anteriormente de la economía informal", y se manifestó a favor de la adopción de un convenio complementado por una recomendación.
En tanto que el vicepresidente Rahman, representante de los empresarios, expresó que en materia de trabajo doméstico "Las mejores prácticas del mundo, como las de Francia, Marruecos y Uruguay, podrían servir de guía a otros países, adaptándolas a las circunstancias nacionales".
En tanto que la vicepresidenta, representante de Singapur por parte de los trabajadores, H. Yacob, manifestó que "el ejemplo del Uruguay demostraba que la legislación adecuada no obstaculizaba la creación de empleo, y el compromiso general de cumplir las normas internacionales del trabajo y contribuía a la lucha contra la pobreza".
Aumentar el poder adquisitivo de los trabajadores domésticos mediante salarios y condiciones de trabajo justos podía también funcionar como un catalizador del crecimiento económico.
Yacob señaló la importancia de promover una educación inspirada en los principios de los derechos humanos y en la igualdad de género, así como de reconocer y valorar el trabajo doméstico" .
Por su parte, el miembro gubernamental de Uruguay, Loustaunau, reiteró su apoyo a la adopción de un convenio complementado por una recomendación. El convenio debería tomar en consideración la evolución demográfica de los 30 años siguientes: el envejecimiento de la población, lo que requeriría disponer de un mayor número de trabajadores domésticos para suministrar cuidados a las personas de edad en los hogares. Los resultados de la adopción de un convenio no dependerían únicamente de su ratificación. La existencia de un convenio y una recomendación aportaría una serie de ventajas a todos los trabajadores domésticos.
Finalmente, el Ministro de Trabajo y Seguridad Social, Eduardo Brenta manifestó el reconocimiento que recibió Uruguay en el seno de la Asamblea General de la OIT, expresado por numerosos delegados y expresó su satisfacción por la aprobación de la adopción de un convenio acompañado de una recomendación sobre el trabajo doméstico el cual será analizado en la Conferencia de la OIT del año 2011.