Yo Estudio y Trabajo: Presentación institucional de la 5ta. Edición

Se dieron a conocer resultados de evaluación de impacto del programa
Con la presencia del ministro Ernesto Murro, el director nacional de Empleo, Eduardo Pereyra, el presidente del CODICEN, Wilson Netto, y el director del INJU, Santiago Soto, entre otras autoridades nacionales, se realizó la presentación de la 5ta. Edición de Yo Estudio y Trabajo a representantes de las instituciones públicas participantes del Programa. En esta oportunidad, técnicos del departamento de Empleo Juvenil y de la Unidad de Estadística del Trabajo y la Seguridad Social informaron sobre las caractarísticas y evolución de este programa y dieron a conocer los resultados de la evaluación de impacto de la primera edición del Programa (año 2012). De acuerdo al cronograma establecido hasta el momento, las inscripciones para esta edición se abrirán el viernes 2 de setiembre.
Pereyra destacó que con esta quinta edición, en el acumulado desde el año 2012, totalizarán 3.500 los y las jóvenes que han tenido una primera experiencia laboral en el Estado compatible con su permanencia en el sistema educativo. Señaló también que contando las cuatro ediciones anteriores suman más de 140.000 los inscriptos interesados en participar de esta iniciativa.
Sobre los resultados de la evaluación de impacto de la edición de 2012, Pereyra manifestó que son muy positivos, tanto en lo referente a lo educativo como a lo laboral. "Los jóvenes que han participado en este programa, en especial los que provienen de hogares en situación más crítica o con carencias, tienen mejores condiciones para desempeñarse en el mercado laboral formal y quedaron también en mejores condiciones para permanecer en el sistema educativo".
Síntesis de la evaluación de impacto del Programa presentada:
El programa Yo Estudio y Trabajo (DINAE-MTSS) brinda una primera experiencia laboral formal a jóvenes que continúan estudiando, con el objetivo de que esta experiencia incida positivamente en la probabilidad de que continúen los estudios y de que los futuros trabajos también sean formales y de calidad.
Por lo tanto, la evaluación de impacto que aquí se resume es de vital importancia para conocer los resultados que el programa tiene en relación a la educación y el trabajo de las y los jóvenes. Así, se analiza el impacto sobre la probabilidad de tener un empleo formal y la de mantenerse vinculado al sistema educativo en distintos momentos del tiempo luego de la participación en el programa.
Las evaluaciones de impacto son un tipo particular de evaluación que intenta responder a preguntas sobre causa y efecto. Esta evaluación de impacto analiza los cambios en las variables tener empleo formal y mantenerse vinculado al sistema educativo (variables de resultados) que son directamente atribuibles al programa Yo Estudio y Trabajo. La información con la que se cuenta surge de un formulario de inscripción que los candidatos debían completar al momento de anotarse en 2012 y de los registros administrativos brindados por BPS, ANEP y UDELAR.
Considérese que los programas de empleo tienen efectos que difieren según el plazo y que dependen de las características de los participantes así como del tipo de entrenamiento laboral que desempeñan. Por tal motivo se estudian los resultados en distintos momentos del tiempo y según diversas características de las y los jóvenes. En particular, se estudiaron los efectos en el cortísimo, corto y mediano plazo de la primera edición del programa, atendiendo a los diferentes resultados según región, edad, nivel educativo y si el hogar al que pertenece el joven recibe AFAM.
La evaluación realizada arrojó, entre otros, los siguientes resultados:
Impactos significativos y positivos del programa en el acceso a trabajo formal en el mediano plazo para los jóvenes que pertenecen a hogares que cobran AFAM. Para estos jóvenes incrementa la probabilidad de tener un empleo formal entre 8 y 12 puntos porcentuales según la especificación considerada.
Al considerar la modelización conjunta (mantenerse en el sistema educativo y acceder a un empleo formal), el impacto también es positivo en la vinculación al sistema educativo. Para estos jóvenes, el programa incrementa la probabilidad de estar vinculado al sistema educativo y de tener un empleo formal en 9,5 puntos porcentuales para las mujeres de edad promedio de Montevideo con Bachillerato y en 10,2 para los varones. En el interior el efecto es 7,4 puntos para las mujeres y 8,4 puntos para los varones.
Para los jóvenes de 18 y 19 años de edad se observan también impactos significativos y positivos en tener un empleo formal en el mediano plazo. Para ellos, el programa incrementa la probabilidad de cotizar entre 7 y 10 puntos porcentuales según la especificación realizada.
En el corto plazo (15 meses después de finalizado el programa) no se observan impactos estadísticamente significativos en tener un empleo formal ni en la vinculación al sistema educativo. Lo que puede entenderse como un período de transición entre la experiencia del programa y la integración a un nuevo empleo formal a través del mercado de trabajo.
En el cortísimo plazo no se observan impactos significativos para los jóvenes del Interior y los que pertenecen a hogares que cobran AFAM, sí se observan impactos negativos para los jóvenes de Montevideo y los que residen en hogares que no cobran AFAM. Tal como se señala en la literatura de estos temas, los jóvenes que pasaron por programas de empleo a la hora de emplearse nuevamente tienen mayores exigencias.