10 años después: la planificación territorial ya es un hecho en Uruguay

El 2018 fue un año especial pues se cumplieron los primeros 10 años de vigencia de la Ley de Ordenamiento Territorial. La aprobación de la ley fue el comienzo de un cambio sustancial para iniciar un camino hacia el uso más racional y democrático de ese recurso vital, frágil y finito que es el suelo.
Diez años después Uruguay ya cuenta con 79 instrumentos de ordenamiento territorial aprobados y un conjunto de estrategias nacionales que prácticamente dan cobertura total y marcan la consolidación de la planificación territorial en el país.
Logros
Dentro de estos avances, especial destaque requiere la aprobación del primer instrumento de escala nacional: las Directrices Nacionales de Ordenamiento Territorial. Esta norma establece las principales líneas estratégicas del modelo de desarrollo territorial. Es decir que nos brinda por primera vez una visión de futuro, consensuada democrática, de cómo queremos que sea la ocupación y el desarrollo de nuestro suelo para las futuras generaciones.
El modelo plasmado en las directrices nacionales promueve la localización ordenada, ambientalmente sostenible y socialmente inclusiva de las actividades productivas, los equipamientos, servicios e infraestructuras, así como de los planes de inversión pública en el territorio.
Entre sus pilares se encuentra la descentralización; la desconcentración territorial y funcional de las actividades para equilibrar el desarrollo de las distintas regiones del país. A nivel de nuestras ciudades, alienta la densificación y mejor aprovechamiento del suelo urbano, con criterios claros en cuanto a que los patrones de localización deben propender a la integración y heterogeneidad social.
Acceso a la ciudad
En este sentido, la aprobación de la Estrategia Nacional de Acceso al Suelo Urbano (Enasu) supone un jalón fundamental, ya que integra diecinueve líneas de acción simultáneas con el propósito de hacer un mayor y mejor aprovechamiento de suelo urbanizado, estimulando la integración social y la universalización de los beneficios de la ciudad a todos sus habitantes.
Entre las metas ya alcanzadas dentro de la Enasu se encuentra la implementación de proyectos urbano habitacionales de alto impacto en varios puntos del país (Paysandú, Montevideo, Canelones y Río Negro) que supone el aprovechamiento de áreas y estructuras vacantes en zonas que cuentan con todos los servicios.
También se mejoró la gestión de la Cartera de Inmuebles para Vivienda de Interés Social (Civis), al tiempo que se fortalecerán las carteras de 11 gobiernos departamentales.
Asimismo, se viene avanzando en el desarrollo de herramientas de gestión, como las ordenanzas departamentales, para aumentar la eficacia en el manejo y usos del suelo en todo el país.
Ciudades sostenibles
Se inició también la Estrategia Nacional de Ciudades Sostenibles que incluye la dimensión ambiental, en particular las acciones necesarias para hacer frente al cambio climático mediante su incorporación a la planificación de las ciudades e infraestructuras. Esta estrategia para garantizar la sostenibilidad de nuestros centros poblados hace foco en la ciudad compacta, las infraestructuras verdes, la movilidad y las viviendas sostenibles.
Sistema de ciudades
A escala regional, se desarrolló el Sistema de Ciudades, una herramienta para identificar y fortalecer las políticas descentralizadoras. A través del estudio de cómo se mueven los habitantes entre distintas ciudades del país, se busca apoyar la gestión pública en salud, educación, producción, transporte y seguridad. Ya hay claros ejemplos en las políticas de descentralización universitaria y ahora se suma un trabajo conjunto entre la Dirección Nacional de Ordenamiento Territorial (Dinot) y Asse para la implementación de los cambios en la regionalización y descentralización de los centros de salud en todo el país.
Cuencas claves
Se inició también el Programa Nacional para la Cuenca del río Santa Lucía que integrará las acciones sectoriales que han ido generando con lineamientos territoriales estratégicos de mediano y largo plazo.
Se está trabajando en la planificación de la cuenca del Río Negro (región centro y noreste) para apoyar las acciones ambientales y la definición de acciones para impulsar el desarrollo del sistema de localidades vinculadas a la actividad forestal y atender las transformaciones territoriales derivadas de grandes inversiones allí localizadas.
Además, se elaboraron las bases para la Estrategia Regional del Litoral en acuerdo con las intendencias de Artigas, Salto, Paysandú, Río Negro, Soriano y Colonia como parte de la Agenda Litoral del Uruguay.
Por los pagos de la patria
A nivel departamental, 10 años después de la aprobación de la Ley, 15 de los 19 departamentos cuentan con directrices departamentales de Ordenamiento Territorial. Además, 18 de 27 ciudades con más de 20.000 habitantes tienen ya su plan local de ordenamiento y otra variedad de instrumentos que prácticamente cubren todo el territorio nacional.
Gente trabajando
En materia de recursos técnicos y humanos se continúa capacitando a los técnicos de varias intendencias para avanzar hacia la generación de sus propios sistemas de Información Territorial, en línea con las actuales exigencias del gobierno electrónico.
Estos logros, junto a una nueva generación de instrumentos y herramientas de planificación y gestión territorial, renuevan el compromiso de trabajo para lo que resta del período, y nos permiten afirmar que la planificación territorial ya es un hecho en el Uruguay.