Proyectos socio comunitarios y capacitaciones en el barrio Andresito de Salto
Las familias participantes, vecinos, autoridades y equipo de territorio de Plan Juntos, representantes departamentales y referentes de las instituciones que trabajan en el barrio se reunieron para celebrar la culminación de ambos proyectos llevados adelante en el barrio Andresito de la capital salteña.
Las dos actividades se enmarcan en una de las dimensiones de trabajo impulsada desde el Área Social: el Desarrollo Comunitario y reúne a cuatro líneas de acción prioritarias para el Plan, como lo son el apoyo a las iniciativas productivas, la capacitación, el trabajo solidario y la generación de proyectos socio comunitarios.
Natalia y María, dos de las participantes de este barrio, fueron parte fundamental del proyecto “Nosotros formamos un grupo de venta para recaudar fondos para las casas y un día se nos ocurrió hacer pizzas en los hornos de cada una; estuvimos desde las 7 de la mañana hasta las 10 de la noche, solo para vender un día. Entonces a partir de esa necesidad del grupo surgió la idea del horno para poder producir más rápido y en mayores cantidades y se empezó a construir. El horno es para todo el barrio, no solo para las familias participantes del Plan y vamos a formar una comisión para organizarnos. Quien lo quiera usar lo tiene que pedir con un día de anticipación y se le van a dar los accesorios para limpiarlo y devolverlo en las mismas condiciones en las que lo recibió”, cuenta Natalia. Y agrega “Es para uso de todos pero hay que cuidarlo, el préstamo es sin costo y tienen que traer sus propias herramientas. Para el grupo del Plan tenemos todo, la pala, las placas metálicas, herramientas para decorar y otros elementos”.
“Además tenemos un extra con la formación y los cursos. Acá hicimos un curso de panadería y otros compañeros siguen estudiando para especializarse en repostería y decoración. Si no tenés la posibilidad de salir a trabajar porque tenés hijos chicos, los cursos te dan la oportunidad de trabajar en tu casa y salir a vender”, relata María desde su propia experiencia, ya que es madre de niños pequeños.
La construcción del horno llevó 15 días y contó con la supervisión de Alberto, un docente voluntario que también trabajó en la construcción de otros hornos en distintas intervenciones del país.
Con respecto a la construcción de las viviendas Natalia comenta “Las obras van muy bien, ahora tenemos cinco casas en construcción y las otras 15 ya están listas. Hay muchas personas comprometidas, que cumplen con los trabajos en las obras, los obreros nos enseñan las tareas que tenemos que hacer y entre todos trabajamos y cuidamos las casas. Yo antes ni sabía de que se trataba el Plan, veía los carteles en las casas pero no sabía, hasta que llegó la asistente social a visitarme y me hizo una entrevista, al otro día vino a avisarme que quedaba adentro del Plan. No me olvido más de ese día, fue el día más feliz. El Plan nos trajo muchos cambios, con nosotros y con el barrio”.
Previo a la ceremonia de entrega de diplomas y a la inauguración del horno, los estudiantes del curso de panadería participaron de una clase abierta en donde elaboraron las pizzas y decoraron las tortas que se compartirían más tarde.
El subgerente del Área Social de Plan Juntos, Camilo Álvarez, comentó “Es un momento muy agradable, no solamente por la entrega de los diplomas y la inauguración del horno, sino también por este encuentro. Plan Juntos en Salto ha tenido mucho de esto, de ir construyendo grupos de vecinos y vecinas, sobre todo de mujeres que se fueron encontrando y fueron buscando la forma de salir adelante, que implica luchar contra un montón de prejuicios, contra el no se puede, contra el siempre fue así y va a seguir siendo así. La lucha implica la posibilidad de mostrarle a otros que eso es posible, lo imposible solo cuesta un poco más. De eso ha dado muestras el Plan Juntos todo este tiempo”.
Y agregó “Los vecinos del Plan no son beneficiarios individuales, cada vez que se logra construir una casa, desarrollar un emprendimiento, recibir un diploma, terminar la escuela o el liceo, nos beneficiamos todos. Cada vez que una familia sale de una situación complicada nos tenemos que sentir todos orgullosos. Por eso los participantes no son beneficiarios, son vecinos que comparten con los equipos técnicos una forma de construir una nueva vida, que es lo que nos enorgullece y nos anima a seguir adelante porque sabemos que es posible”.
“Que tiene que ver el horno con las casas? Lo que hemos aprendido es que la casa es un paso importante, pero es un paso y que se precisan otras cosas. Para nosotros es importante este tipo de actividades, un horno comunitario implica un espacio para que los vecinos se junten para compartir, y ustedes pueden ir a hablar con las mujeres de otros barrios para contarles que se pueden hacer cosas para salir de las situaciones en las que están", reflexionó Álvarez.
El encuentro prosiguió con la entrega de diplomas a nueve estudiantes que finalizaron la primera parte del curso de panadería, mientras que los restantes alumnos lo recibirán cuando culminen la especialización en bollería y repostería.
Paula, docente a cargo del curso, expresó su agradecimiento por haber sido convocada para esta instancia y compartir sus conocimientos con los participantes de Plan Juntos. Reflexionó sobre la importancia de aprovechar las oportunidades, en este caso aprender un oficio que brinde nuevas posibilidades laborales y destacó el trabajo en equipo, el esfuerzo y la dedicación de los alumnos. “Han trabajado muchísimo estos meses. Hoy terminamos el curso de panadería con esta clase abierta para que la gente vea lo que hacen. El certificado de estudios que reciben hoy es de esta etapa de panadería y la semana que viene empezamos el curso de bollería. Dentro de un mes las alumnas de repostería y decoración también recibirán los diplomas del curso que están haciendo”.
El horno no es el único proyecto socio comunitario en el cual participó este grupo de 20 familias. A fines del año pasado inauguraron la plaza sonora del barrio Nuevo Uruguay, un espacio con instrumentos musicales construidos con materiales reciclados de pvc, aluminio y madera, y ahora están a la espera de poder instalar contenedores de basura en varias esquinas del barrio.