Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca

El taller de hoy reunió a 15 analistas de todos los puntos del país que viajaron a la capital para realizar junto con integrantes de DGDR y Fundasol, la evaluación de cómo está la cartera a nivel nacional y de cada analista en particular.

En la apertura el director de DGDR, Carlos Rydström dio la bienvenida resaltando que “conocerlos cara a cara es mejor para poder entender y conocer mejor lo que ustedes hacen, que nosotros entendemos como una política pública muy importante…de las tres ideas importantes de la DGDR que estamos trabajando…la tercera y no menos importante es el microcrédito rural”. Agregó que “hemos visto las dificultades que ha tenido toda la ruralidad para interactuar, para ponerse en contacto para trabajar, y el resultado que ha tenido el programa es tremendamente exitoso…y pretendemos desde DGDR a partir de eso, fortalecerlo, potenciar el alcance en territorio, y de las herramientas que se pueden tomar”.

Jorge Naya director de Fundasol resaltó el trabajo de los analistas en este tiempo especial de pandemia que ha dificultado el trabajo de todos y ha afectado en salud incluso a algunos integrantes.

El Programa Microcrédito Rural funciona desde 2004. Sus objetivos son satisfacer las necesidades financieras de corto plazo de la población rural que no tiene acceso al crédito formal, y generar organización a nivel local que defina el uso de los fondos basándose en la confianza, el conocimiento y el control social.

Evaluando un año de trabajo

Verónica Ponce de León, referente de Fundasol nos dice que “la jornada de reunión de los analistas de créditos de todo el país…desde marzo de 2019 no nos habíamos podido juntar por la pandemia…están todos muy contentos y entusiasmados con el reencuentro, hay analistas nuevos que se están presentando y viniendo por primera vez”.

Resaltó que como siempre se hizo revisión de los números comparados a un año atrás, y que “el recupero viene muy bien, a 30 días, de más del 98%”. La idea de trabajo es compartir todas las limitantes que los analistas han tenido para trabajar este año particular de pandemia, “ver cuales fueron esas dificultades y cómo levantarlas, pero también ver cuáles fueron las oportunidades que aparecieron y vinieron para quedarse…en todos los grupos de trabajo salió la oportunidad de comunicarse con la gente de otra manera, de utilizar las tecnologías, el whatsapp, el zoom”. Resalta que la falta de contacto directo con la gente influyó en el trabajo local de los analistas.

“En la tarde seguiremos trabajando sobre las oportunidades y tratando de buscar soluciones a las limitantes”, nos comenta y destaca el entusiasmo de todos al recuperar esta forma de trabajo presencial.

En cuanto a los datos del programa nos cuenta “el número de créditos del 2019 al 2020 tuvo una caída, y del 2020 al 2021 sigue cayendo con una tendencia menor…el monto de la cartera de julio del 2020 al 2021 ya empezó a subir…obviamente esto es consecuencia de la pandemia y de que la gente no quiere endeudarse, hay gente que está en seguro de paro, hay gente que por más que sigue con su producción o su comercio, no quiere arriesgar a ampliar, hay una retracción”. Destaca que si bien esto es una limitante para poder seguir creciendo en cartera de clientes, “también habla bien de la gente que durante muchos años tomó el crédito, y ahora dijo no, voy a esperar, voy a ver qué pasa” mostrando la responsabilidad y confianza sobre la que se basa el programa. Nos cuenta que para cerrar la jornada en la tarde, “hay un compañero que se jubila y tenemos un pequeño homenaje y un regalito de parte de todos”.

Homenajeado…

Nelson Albernaz es analista nos cuenta: “creo que ya cumplí una etapa dentro del programa, ya hace 13 años que estoy, ha sido una experiencia maravillosa, de buscar ayudar a la gente, y más donde trabajamos todos mayoritariamente, en el interior profundo de cada lugar, como el lugar donde vivo, a 140 km de la ciudad más cercana que es Salto…donde no tenés otras oportunidades”.

Nelson es productor ganadero de Paso Nuevo de Arapey en el departamento de Salto, un pueblito que ya no existe más porque  la “escuela rural que tenía 84 alumnos cuando fue mi padre”…y que cerraron cuando fue su hijo mayor porque tenía sólo 4 alumnos. Destaca como se está despoblando esa zona del país, donde además “tuve que cerrar 3 comités de crédito porque no había gente para armar los comité”. A pesar de eso está orgulloso de formar parte de este grupo y este trabajo. Nos pone como ejemplo que “hay clientes de 80 años que te sacan un crédito y nunca antes sacaron…eso es reconfortante”.  

Tiene un predio de 54 hectáreas de suelo pedregoso, con bajo índice CONEAT donde cría ganado, lo que lo limitó y obligó a criar animales en otros predios. Formó parte del Grupo Julia Arévalo de Roche integrado por 64 productores, que se dividió en 5 grupos menores que siguen funcionando. “Del campo todavía no me voy a jubilar, pienso trabajar un poco más en el campo”.