Ministerio de Defensa concreta primera compra directa a CONAFPU, como organización registrada y habilitada

El mensaje es que se puede
CONAFPU fue la primera organización en quedar habilitada en el RENAOH. Ya tenía una experiencia previa de venta, con el Ministerio del Interior, a través de un convenio con la Intendencia de Canelones: “Ya teníamos los papeles en orden; ese ejercicio ya lo teníamos hecho, entonces, cuando sale la reglamentación, pudimos ser la primera organización en quedar habilitada y ahora somos la primera venta a través de la ley de compras públicas. Eso nos enorgullece”. “Nosotros siempre estamos tratando de transmitir a las otras organizaciones que se puede. Que las cosas llevan trabajo, nada es fácil, pero hay que moverse y tener esperanza. Se puede y se está demostrando, somos varias cooperativas: la cooperativa de productores de cerdos, los horticultores de San Antonio, otra cooperativa de Canelón Chico que está terminando los trámites para quedar registrada… y todo gracias a la perseverancia, al esfuerzo”, sostiene Pereyra.
Según el secretario de CONAFPU, muchas cosas han cambiado: “Ahora es más fácil, hay más apoyo: apoyo de la Dirección de Desarrollo para que las organizaciones se pudieran registrar; hubo apoyo financiero… Las herramientas están y hay que aprovecharlas, es el mensaje que queremos transmitir”.
Esta compra directa en particular, para la cooperativa de façoneros, tiene un gran significado: “primero, que la ley está funcionando; segundo, la esperanza de seguir golpeando otras puertas; y tercero, nos empieza a dar el volumen de masa crítica que vamos a precisar en la planta de faena”, dice Pereyra.
Como se recordará, los façoneros presentaron un proyecto de planta de faena a instalar en San Jacinto, que está a estudio de INAC, que ya solicitó algunas modificaciones. Una vez que la planta esté operativa, podrán vender pollo trozado: “En el tema de trozado es donde tenemos mayor sobrecosto, porque tenemos que faenar en una planta en Canelones y después trasladar el pollo a otra planta en Montevideo, donde se hace el trozado y tenemos desperdicio de algunos cortes, que es difícil colocarlos… La planta nos va a bajar costos y nos va a dar una mejora en la calidad del producto, que si bien es bueno, apostamos a un producto “premium”. El hecho de tener la propia planta nos permitirá acceder al mercado privado y aspirar a un mejor precio, por ser un producto diferenciado: por la calidad social del producto. Que el consumidor que vaya a la góndola a comprar, esté apoyando con su compra un proyecto asociativo, donde atrás están los productores familiares”.
CONAFPU ya tiene un circuito armado para la distribución: “Nosotros contratamos el servicio de distribución… Es preferible tener un pesito más de costo, pero tener la certeza de que el que está en ese servicio tiene la responsabilidad, los equipos y la experticia de la distribución. Tenemos un circuito armado, con dos distribuidores: uno para el gran volumen, que se entrega en Comcar, para el que contratamos un camión con capacidad de 5 mil kilos, y otro vehículo más chico, de 2 mil kilos”.
Cabe recordar que por un convenio de organizaciones con el Ministerio del Interior, ya se había concretado una venta directa por un plazo, en el marco de la Ley 18.362, por parte de la cooperativa de los productores de cerdos, CALUPROCERD; la cooperativa de los façoneros de pollos, CONAFPU; la cooperativa Molino Santa Rosa y Caorsi, que vende derivados de harina; y la Cooperativa San Antonio, que vende hortalizas. Esto ha implicado un total de ventas de casi 9 millones de pesos entre 2014 y 2016, y ha involucrado a un total de 153 productores.
Al Ministerio de Defensa, CONAFPU deberá entregar una vez por semana. Lo bueno es que han tenido buena adaptabilidad: “Nos ha pasado con el Ministerio del Interior, que les ha fallado la carne roja, precisaban comida, nos llamaron y en la medida que teníamos disponible en cámara, pudimos ir y entregar”, cuenta Pereyra.
La Cooperativa está integrada por 20 socios, productores façoneros: “La perspectiva es que en un futuro, gran parte de la producción de pollo de Uruguay se produzca a través de procesos asociativos. Es nuestro sueño, nuestra utopía”.