Mujeres rurales se encontraron para evaluar la política “Somos Mujeres Rurales” y pensar en nuevas propuestas

En la primera edición de esta convocatoria a mujeres rurales se presentaron 126 proyectos, con más de mil mujeres involucradas. Finalmente hubo un total de 29 propuestas financiadas, con más de 270 mujeres participantes. El llamado estuvo dirigido a organizaciones, grupos o colectivos de cinco o más mujeres de 18 o más años, preferentemente radicadas en el medio rural y/o directamente vinculadas a la actividad agropecuaria, para que presentaran propuestas orientadas a contribuir en los procesos de desarrollo rural sustentable con inclusión social.
En esta oportunidad, algunas de las mujeres integrantes de los 29 proyectos aprobados, evaluaron la política y compartieron lo vivido durante toda esta etapa de trabajo.
Buscando reducir las desigualdades
El director de Desarrollo Rural, José Olascuaga, dio la bienvenida a las mujeres y señaló que esta herramienta no surge por casualidad: “atrás de esto hay una voluntad política de trabajar para reducir las desigualdades y lograr procesos de inclusión”. Olascuaga también se refirió a la importancia de la participación y dijo que la construcción de las políticas públicas y de las herramientas, “deben ser ejecutadas, puestas a prueba y evaluadas en conjunto con la sociedad”. Esto fue lo que impulsó a crear las Mesas de Desarrollo Rural y a estimular y fortalecer a las organizaciones rurales.
Olascuaga recordó que antes, el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca se ocupaba solamente de la dimensión económica y productiva, dejando bastante de lado las dimensiones sociales y ambientales del desarrollo. “El desarrollo es mucho más que eso: es también la gente, la calidad de vida de la gente y también el tema medioambiental”, enfatizó. Mencionó que a partir de 2005 se empezó a generar estructura y se creó la Dirección General de Desarrollo Rural, donde se empezó a trabajar con una mirada más amplia del desarrollo rural y por tanto empezaron a aparecer los temas de género y juventud.
“Se vio que el acceso de las mujeres no era equitativo y que había que hacer algo”, recordó Olascuaga. De esta manera se comenzó con un proceso interno de capacitación y sensibilización de los funcionarios del Ministerio en temas de género y se buscó también la articulación entre distintas instituciones con el cometido específico de trabajar estos temas: así surge el vínculo con el INJU e INMUJERES.
Según Olascuaga, ahora el desafío es pensar en un nuevo llamado, más adecuado a las necesidades y realidades de las mujeres rurales y los grupos organizados.
Diálogo y articulación con otras instituciones
En agosto de 2016 se invitó a otras instituciones del Estado, que finalmente apoyaron con la ejecución de los proyectos, entre ellas el Instituto Plan Agropecuario, el Instituto Nacional de Colonización, El Ministerio de Turismo y Deportes, el Ministerio de Educación y Cultura y la Secretaria Nacional de Deportes. En el marco de este llamado, este año, 80 mujeres de diversos puntos del país participaron de un campamento en Parque del Plata.