Proyecto “Más inclusión para el desarrollo rural” evalúa Fase uno y se extiende a todo el eje de Ruta 7

La idea es trabajar con los sectores de mayor pobreza, en el eje de ruta 7. En la primera fase se trabajó en el área de cobertura de las Mesas de Desarrollo Rural de Canelones Noreste y Santoral (Soca y Piedras de Afilar), el este de Florida (Reboledo, Chilcas y Chingolo) y el oeste de Lavalleja (Polanco, Gaitán y Estación Solís). En la segunda fase se extiende a todo el eje de cobertura y se incluye a Caraguatá en Tacuarembó, Fraile Muerto en Cerro Largo y el oeste de Treinta y Tres.
El trabajo permitirá fortalecer las Mesas de Desarrollo Rural, incluir a los productores familiares en las cadenas de valor, incluir a los asalariados rurales en las políticas de desarrollo rural, y que la población rural acceda a servicios que mejoran su calidad de vida. Se apoyan acciones de capacitación, asistencia técnica, y capitalización de las organizaciones rurales a través de proyectos sociales y productivos, entre otras.
Los proyectos sociales apuntan a resolver necesidades y dificultades de la población a través de pequeñas inversiones que faciliten el acceso a servicios públicos o bienes públicos para mejorar la calidad de vida. Las inversiones se deben realizar en espacios de uso comunitario o público. Los proyectos productivos son para aumentar la productividad y los ingresos en la población beneficiaria, a través de la asistencia técnica e inversiones que mejoren los procesos de producción y comercialización, buscando la inserción de los productores familiares en las cadenas de valor.
No se trabaja en base a un llamado del Ministerio, como en otras oportunidades, sino que la idea es que en base a la apreciación del territorio que hay desde las Mesas de Desarrollo Rural, los equipos territoriales de Desarrollo Rural se reúnen con la gente y elaboran la propuesta junto con la comunidad.
Por asignación presupuestal, el primer año había mucho menos dinero destinado para este proyecto (18 millones aproximadamente), a partir de este año aumenta el monto a 40 millones, por tanto, el primer año se acotó el territorio (fase 1) y ahora se extenderá a toda la zona.
Hasta el momento, y como parte de la fase 1, hay 15 proyectos funcionando. En Lavalleja funcionan 7 proyectos (5 productivos y 2 sociales); en Canelones funcionan 6 (3 sociales y 3 productivos) y en Florida funcionan 2 proyectos (productivos).
Los proyectos productivos abarcan a productores y asalariados y los sociales abarcan a la comunidad en general.
Algunas experiencias
Para tener una idea de en qué consisten los proyectos, hay propuestas muy variadas: En Estación Solís se está trabajando en un proyecto para instalar una policlínica para la zona, donde el MSP coordinaría entre Asse y la Mutualista el funcionamiento de un médico para atender ambas instituciones. En Polanco y Gardel se financiará la instalación de estaciones fijas de aparatos deportivos y además se pagará un profesor de Educación Física para que instruya. También hay diferentes grupos productivos: en Lavalleja funcionan dos grupos. La intención es articular con Colonización, ya que allí hay campos a los que se accedió recientemente y entraron grupos con asalariados rurales. La idea es fortalecerlos, ya que estos grupos presentaron como propuesta hacer mejoras productivas en el campo. Hay también grupos de queseros artesanales: algunos proponen mejorar las instalaciones y otros mejorar la fase productiva: comprar vacas, mejorar pasturas o alimentación. Hay grupos dedicados a la producción avícola, que producen huevos y se va a articular con ellos para las compras públicas. Otros, de producción hortícola, pedían financiar un invernáculo para aprender sobre el tema, y micro-túneles para la producción. Plantean una venta común una vez a la semana en Minas. Hay un grupo de mujeres que trabaja en telar y se les financiará la compra de los insumos para trabajar y una profesora. Piensan armar un puesto de comercialización y se invertirá en infraestructura. Un grupo de mujeres de Florida tiene un proyecto de vivero, con el propósito de comercializar plantas y árboles en el territorio. Otro grupo de mujeres, en Migues, de Mevir, hicieron un curso de vivero y como tienen un pedazo de tierra para producir, quieren dedicar una parte a la horticultura y a la comercialización en conjunto.
Ahora, el Proyecto “Más Inclusión” se abre a todo el territorio del eje de Ruta 7, abarcando ocho Mesas de Desarrollo Rural: Canelones Noreste y Santoral, Caraguatá, Florida, Lavalleja, Ruta 7 Norte, Ruta 7 Sur, Sarandí del Yí y Treinta y Tres. Se harán cierres bi-mensuales para ir avaluando los proyectos. En Canelones, en la última Mesa de Desarrollo del mes de diciembre, se habían aprobado siete nuevos proyectos.