“Tenemos el derecho y la obligación de trabajar mano a mano con los hombres para mejorar el espacio en que vivimos y decidir el futuro de nuestra sociedad”.
Instituciones y organizaciones convocantes presentaron visiones, avances y compromisos plasmados en el documento VOCES DE LAS MUJERES RURALES de lineamientos en torno a la situación de las mujeres rurales que surgió el 15 de octubre de 2015 en Young, Río Negro, y que sirve de referencia de trabajo, evaluación y continuación de mejora.
Abrió la actividad el Presidente del Instituto Plan Agropecuario, Mario Pauletti, dando la bienvenida muy especialmente al grupo de mujeres de las instituciones que están trabajando en pro de la mujer rural, y confirmó desde su institución el aporte de ponerse a la orden apoyando esta y otras actividades.
Silvia Páez, Secretaria de la Red de Grupos de Mujeres Rurales del Uruguay, agradeció la invitación a “participar de este espacio de diálogo abierto que comenzó justamente un año atrás, en el encuentro realizado en Young, donde realizamos conjuntamente el trabajo de monitoreo y seguimiento de las políticas sociales pensadas en las familias que vivimos en el campo en general y de las mujeres en particular”. Reconociendo que se ha avanzado pero aún queda mucho por hacer, abordó varios temas que son preocupación de su organización: el uso de agrotóxicos y pesticidas que conspiran contra la salud de quienes viven en el campo; temas vinculados a la salud como el acceso a la consulta en cada zona, o las dificultades de trasladarse hacia las capitales de los departamentos; la pérdida desde este año del beneficio de reserva telefónica de asientos en el transporte colectivo. Se refirió al tema de violencia comentando “no se ha pensado en un abordaje a mujeres rurales víctimas de violencia doméstica. Sabemos que existen dispositivos móviles para asesorarlas, pero estas mujeres deben trasladarse a las ciudades para ser atendidas por el servicio especializado de violencia que se encuentra en las capitales departamentales”. Entendemos que en este diálogo nuestra incidencia debe ser crear, potenciar, integrar y avanzar con propuestas que unan nuestras experticias con decretos, normas, con leyes a nivel nacional pues consideramos que la multiplicación de nuestras sinergias lograrán sensibilizar, comprometer a asumir responsabilidades para lograr lo del slogan que dice “Igualdad de oportunidades y derechos” sea realmente una realidad. Reivindicó con sus palabras la participación conjunta de instituciones y sociedad civil, que garantice su trabajo y elección de vivir en el campo, con igualdad de derechos y oportunidades. Cerró su participación citando a Paulo Freire “No hay palabra verdadera que no sea unión inquebrantable entre acción y reflexión”.
Alix Cardoso, Presidenta de Asociación de Mujeres Rurales del Uruguay (AMRU), nos decía “Hoy celebramos nuestro día desde que la ONU así lo decretó en 1995 en Beijing”…queremos superar el reto cada vez mayor de vivir en nuestros predios, queremos producir, y que queremos que tienda al aumento, la hoy tan baja representación en los procesos de toma de decisiones. Las mujeres rurales jugamos un papel fundamental en la seguridad alimentaria, en el desarrollo y en estabilidad de las áreas rurales. Destacó sus pedidos hacia una educación específica que dé oportunidades de trabajo y permanencia en el campo a los jóvenes. “Hoy más que nunca debemos defender nuestra escuela rural y nuestras escuelas agrarias”. Hizo especial hincapié en el cuidado del medio ambiente: “La pérdida y la degradación de los ecosistemas y la biodiversidad y la falta de acceso al agua amenazan directamente a las mujeres y es por ello que queremos llamar particularmente la atención en un tema que nos preocupa y mucho: el cambio climático”. Hizo referencia a palabras de Carmen Carlini, una vieja fundadora de AMRU que decía: “la pérdida de la cosecha se puede estimar en términos económicos, no así el desaliento, la tristeza, la angustia, el dolor de toda una familia”. Cerrando su alocución nos dijo “Tenemos el derecho y la obligación de trabajar mano a mano con los hombres para mejorar el espacio en que vivimos y decidir el futuro de nuestra sociedad. La vida en el campo es dura pero es hermosa”.
Crisitina Revetria, nos dijo que “Comisión Nacional de Fomento Rural (de la cual es vicepresidenta) organización con 101 años de vida, y más de 100 organizaciones a lo largo y ancho de todo el país, que hoy nuclea a más de 17.000 familias ha trabajado históricamente por el desarrollo rural de nuestro país y la vida digna de las familias que pueblan nuestro medio rural…generando espacios de trabajo para escuchar las voces de los jóvenes, de las mujeres, de los hombres y de la producción familiar”. Destacó entre los temas de importancia la promoción de salud, el acceso a la formación y capacitación. “Desde nuestra organización trabajamos por un desarrollo rural inclusivo con equidad de género y eso solo es posible si partimos de un trabajo desde el propio individuo, construyendo relaciones de equidad en la familia, la comunidad, las organizaciones locales y la sociedad en su conjunto…para incidir más es que debemos estar cada día más y mejor organizadas”.