Cursos autogestionados: el desafío de la ONSC
Según varios estudios internacionales, uno de los desafíos de contar con este tipo de cursos, es el porcentaje de culminación efectiva que tienen los mismos.
EdX reportó 2.8 millones de registrados en 2015. Sus egresados equivalen a poco más de 172,000, lo que representa aproximadamente un 6%.
De los 32,974 egresados de la UNAM en 2016, quienes finalizaron los cursos autogestionados apenas representan el 3% de los inscriptos.
En el mejor de los casos y en cursos que se abonan antes del inicio, se registran cifras de abandono superiores al 52 %.
Si bien los datos a nivel mundial demostraron que la efectividad del dictado de este tipo de cursos no ha sido la más efectiva, debemos tomar en cuenta también, las ventajas que podría ofrecer de este tipo de dictado.
Los cursos autogestionados permiten que muchas personas puedan obtener capacitación desde cualquier lugar del país, logrando, de esta manera, una efectiva descentralización.
El participante maneja sus tiempos, disponiendo de la realización del curso cuando sus tareas se lo permitan. Cada persona puede priorizar y adaptar sus actividades a sus propios objetivos. Además, el participante requerirá, únicamente, de un dispositivo con conexión a internet.
Teniendo en cuenta el éxito de las convocatorias que realiza la ENAP, y en particular, apuntando a la descentralización y democratización de la capacitación de todo el funcionariado público, se decidió lanzar la primera edición de siete cursos autogestionados. Culminada la primera edición, los resultados han sido excelentes.
Se inscribieron 1008 funcionarios, de ellos 828 culminaron exitosamente el curso al que postularon, lo que representa un 82,14%. La cifra está por encima del promedio mundial para cursos antepagados.
La ENAP tiene como objetivo principal brindar más y mejores cursos para todas y todos los funcionarios públicos, lo que redundará en una mayor capacitación y un mejor servicio a la ciudadanía.