Se viene 
Cada cambio de quincena, durante el verano, las rutas se cargan de Vidas circulando: atención a los adelantamientos.
Se trata de recuerdos que vuelven de vacaciones; se trata de sueños que van a descansar y disfrutar. La velocidad, la distracción, la impaciencia, son los enemigos a la hora de viajar y llegar seguros. Cada decisión puede hacer la diferencia.

Los adelantamientos en ruta son una maniobra riesgosa y compleja, que implica la evaluación de diferentes variables para realizarla: oportunidad, visibilidad, velocidad, entre otras.
Es importante que ante la presencia de una línea continua amarilla en el pavimento (señalización horizontal) o cartelería indicando la prohibición de adelantar (señalización vertical), no realizar la maniobra. De hacerlo, ponemos en riesgo nuestra vida, la de quienes viajan con nosotros y la del resto de los usuarios de la vía.
Un tránsito más seguro es posible. Respetar las normas de tránsito es una forma de construir una movilidad más segura.