OVINOS

Jornada en establecimiento ovino de Maldonado, en el marco de la marca “Cordero Esteño”

“Cordero Esteño” es una marca de carne ovina. La primera marca colectiva del Uruguay. Es propiedad de la Corporación Gastronómica de Punta del Este, de la Sociedad de Fomento Rural e Industrial de Maldonado, y de las Cooperativas Calima y Calai. Surgió a partir del interés de los gastronómicos de generar una identidad a la cocina de Punta del Este, en el año 2016. En ese momento se hablaba de tener 5 platos insignia y de posicionarla como una cocina de renombre internacional al estilo de la cocina vasca o peruana, por poner algunos ejemplos. En ese marco, uno de los platos insignia que se eligió, fue en base a carne de cordero. A partir de ahí surgió la idea de generar una marca propia. Eso llevó un largo recorrido y contó con el apoyo de varias instituciones públicas, como el MGAP, el Ministerio de Industria, OPP y la Intendencia de Maldonado.

“Ha sido un largo trabajo de conocimiento mutuo de todas las partes y de lograr llevar adelante este proyecto”, dice Javier Barrios, ingeniero agrónomo, coordinador del equipo técnico de Calima*.

Actualmente la marca está consolidada y ya se tienen dos temporadas turísticas en las cuales se ha provisto carne de marca Cordero Esteño a los restaurantes de Punta del Este.

La Dirección General de Desarrollo Rural del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (DGDR/MGAP) y el Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL) firmaron en diciembre del año pasado un convenio para el desarrollo de este programa.

“Con el Ministerio vinimos primero que nada a financiar asistencia técnica para mejorar la concreción de un biotipo, de lo que es el cordero esteño; poder agregar más valor desde la producción a esta cadena, y por otro lado contribuir en la trazabilidad del producto y la comunicación, que es importante para la promoción del consumo”, señaló en esa oportunidad director de Desarrollo Rural, Carlos Rydström.

La DGDR, a través del Fondo de Desarrollo Rural, aportó un total de hasta 1 millón de pesos, en una única partida, con el objetivo de construir más valor en la marca “Cordero Esteño”, a través de la mejora de los procesos productivos, la promoción de la marca y el fortalecimiento de la integración territorial entre el sector productivo y el gastronómico.

También se buscó promover la capacitación y la asistencia técnica a través de las cooperativas Calai y Calima a productores vinculados a la marca; promocionar la marca a nivel de redes sociales, eventos y ferias gourmet, gastrónomos y carnicerías, consumidores y puntos de venta en general, de modo de posicionar el producto en el mercado nacional; mejorar la comunicación interna entre los sectores co-titulares de la marca; y escalar el proyecto, en especial incorporando un número mayor de productores, restaurantes y animales faenados en las nuevas campañas del producto en el mercado local.

Se trabaja con fondos del MGAP, que son administrados por el SUL y que están destinados a la promoción de la marca y al trabajo con productores de ovinos, mejorando algunos aspectos productivos y generando una línea de base mediante jornadas, charlas y visitas a predios para levantar algunos indicadores.

Según explica Barrios se va a trabajar con dos grupos de productores: uno en el Sur de Maldonado, que son productores asociados a Calima y a la Sociedad de Fomento Rural e Industrial de Maldonado, que ya inició su trabajo en el establecimiento de Antonio Lustemberg, el pasado 5 de julio. La intención es continuar con cuatro o cinco jornadas similares, en otros predios de productores. El mismo trabajo se va a realizar en el Norte del departamento, en el entorno de la Cooperativa Calai.

“El objetivo principal que nos hemos trazado es aumentar la demanda por parte de los restaurantes de Punta del Este y a su vez estar prontos para responder a esa demanda con una oferta acorde de parte de los productores”, señaló Barrios.

“Cordero Esteño”, además de ser una marca colectiva de cuatro dueños, es una marca con indicación geográfica: “Los corderos que se faenan, con los cuales se produce la carne, tienen que haber sido invernados, engordados y provenir de todo el departamento de Maldonado, todo el departamento de Rocha a excepción de la zona baja en torno a la Laguna Merín, y del departamento de Lavalleja, las seccionales policiales que limitan con el departamento de Maldonado”, dice Barrios. Todo ese territorio está a menos de 100 kilómetros del mar y tiene paisaje de sierra en su territorio. Esas son las dos características que definen la marca desde el punto de vista territorial. Otra característica es que es un cordero pesado, del entorno de los 38 a 45 kilos, alimentado exclusivamente a pasto.

“La jornada en lo de Lustemberg y familia fue muy satisfactoria”, dijo Barrios. Participaron más de 20 productores. Todos manifestaron su interés en continuar trabajando de esta manera y participar en las jornadas. “Se pudo ver una majada muy moderada, desde su tamaño, que tiene un gran trabajo genético para llegar a una oveja madre de alta prolificidad y de un buen tamaño y que genera corderos pesados y de buena carcasa. Se conversó mucho sobre ese tema, se vio el trabajo con perros de la raza Border Collie, pero con un nivel de actividad en la oveja muy bueno. Además se vieron las instalaciones, sobre todo las parideras, que son un aspecto muy importante en la producción (Lustemberg y su familia logra un 130% de señalada). También se vieron algunas pasturas, haciendo hincapié en cómo se manejan y a qué están destinadas.

El establecimiento de Lustemberg y familia tiene 74 hectáreas, de las cuales 40 se destinan a las ovejas, también hay algo de ganado vacuno. Antonio Lustemberg trabaja con su familia, su esposa y sus hijos, que son quienes desarrollan toda la tarea.

 

Un programa “muy ambicioso”

Alfredo Rubio es ingeniero agrónomo jubilado. Es propietario del predio “La Fernandina”, en ruta 9 Km. 117,5. Trabajó como agrónomo desde que se recibió, primero en el MGAP, luego en el Banco República. Además administró y asesoró a varios establecimientos rurales. Fue en tres oportunidades presidente de la Sociedad de Fomento Rural e Industrial de Maldonado, donde actualmente se desempeña como vocal. Esta sociedad fue fundada en 1917 y desde entonces ha colaborado permanentemente con los productores asociados (actualmente unos 200). Desde su fundación hasta el presente “se ha desarrollado en forma lenta pero segura, llegando a contar en la actualidad con un predio de muy buen nivel para distintos usos”, dice Rubio. Cuenta que desde sus inicios se realizaban ferias ganaderas, según la época, y otras actividades como reuniones técnicas para productores, distribución de forrajes en época de crisis, exposiciones ganaderas ovinas, bovinas y equinas, además de alquilar el local para distintos eventos con el fin de recaudar fondos para nuevas inversiones y para mantenimiento.

La mayoría de los productores asociados son ganaderos, con producción de ovinos y bovinos, aunque hay también de equinos y lecheros. Según cuenta Rubio, han tenido apoyo de la DGDR en diversas oportunidades.

En cuanto a la visita del predio de Lustemberg y familia, Rubio dice que fue muy positivo desde el punto de vista de la producción ovina llevada a cabo eficientemente por el grupo familiar, y que “puede servir de ejemplo para productores familiares, que puedan dedicar tiempo a una explotación que necesita dedicación, como hace la familia Lustemberg, que aplica tecnología moderna para las distintas actividades, para lo que cuenta con asesoramiento técnico por parte de Calima y el SUL”. Sostiene que le hubiera gustado que proporcionaran números sobre la explotación, “que sería fundamental para que otros productores puedan llevar a cabo una explotación de ese tipo”.

La marcha del programa del Cordero Esteño, para Rubio, es un desafío: “es muy ambicioso, y a pesar de las trabas que fueron surgiendo, para registrar la marca en primer lugar, hasta conseguir un frigorífico que procese los corderos y envase los cortes al vacío con destino a restaurantes y carnicerías gourmet, cada vez estamos más cerca. Creo que para el próximo verano ya se van a estar produciendo corderos en abundancia para abastecer la marca con mercadería de primera”, dice.

 

*Calima es una cooperativa agropecuaria del sur de Maldonado, con sede en San Carlos, que tiene unos 350 socios activos y unos 100 clientes. Los socios son ganaderos, pequeños y medianos, dedicados principalmente a la cría vacuna, pero también participan de otras actividades, como recría e invernada vacuna, en menor proporción. Además hay un núcleo de productores que trabaja el ovino, para producción de corderos. La cooperativa fue fundada en 1954 y desde ese momento ha tenido una actividad ininterrumpida. Actualmente y desde el año 2005 se encuentra en un ciclo de crecimiento, y en ese período ha ido aumentando su número de socios y su infraestructura. Se dedica a la venta de insumos y da servicios de comercialización, tanto en ganado bovino como ovino. Además brinda servicios de asesoramiento agronómico y veterinario.

 

 

 

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Javier Barrios, coordinador Calima_Cordero Esteño

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