Igualdad y no discriminación de las personas mayores

Las personas cuando envejecen tienen derecho a seguir disfrutando de una vida plena, independiente y autónoma, con salud, seguridad, integración y participación activa. Tanto la vejez como el envejecimiento deben abordarse desde una perspectiva de derechos humanos que reconozca las valiosas contribuciones actuales y futuras de las personas mayores en el bienestar común, la identidad cultural y el desarrollo humano.
La Convención Interamericana sobre la Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores además establece que las personas no pueden ser discriminadas por su edad y, por este motivo, desde los Estados se deben impulsar políticas, planes y legislaciones con enfoques específicos sobre envejecimiento y vejez. Se prestará especial atención a las personas mayores que enfrentan múltiples formas de vulneración, ya sea por motivos de género, discapacidad, origen étnico racial, orientación sexual, identidad de género o situación migratoria.
Las personas mayores tienen derecho a una vida sin ningún tipo de violencia, a recibir un trato digno y a ser respetadas y valoradas, comprendiendo distintos tipos de abusos, incluso el financiero, patrimonial, físico, psicológico, sexual, el abandono o la negligencia.
De acuerdo con la Convención Interamericana sobre la protección de los derechos humanos de las personas mayores, los Estados están comprometidos a promover la eliminación de toda forma de discriminación contra las personas mayores.
La vejez es el presente de muchas personas y el futuro de todas.
Agradecemos a Walter Rey, Hugo Fattoruso, María Clara Fontán, Silvia Olivera Bravo, Luciana González, Mateo Romano y Yamandú Cardozo por ser parte de esta campaña.