Unidad Nacional de Seguridad Vial

Durante la tercera jornada de la reciente Semana Nacional de la Seguridad Vial (SNSV2021), la Red Nacional de Víctimas y Familiares de Siniestros de Tránsito de Uruguay (RENAVIC) y el Área de Psicología de Unasev realizaron un abordaje desde sus respectivas perspectivas.

Alba Curbelo –vicepresidenta en RENAVIC- se refirió al origen de su organización, convocada en el marco de las políticas de Estado, cuando por el año 2011 la Organización Mundial de la Salud recomendó trabajar en el post siniestro.

De esta manera, las diferentes organizaciones que se dedicaban al tema en el país, se conjuntaron y se inició un trabajo complementario que –Curbelo contó- tuvo su punto alto con la Guía de orientación y recursos para ciudadanos afectados por siniestros de tránsito publicada por Unasev; articulación que tomó nuevo impulso cuando desde la nueva gestión se generó un Convenio a múltiples partes, que incluye a ASSE, la UdelaR, FEMI, el Colegio Médico del Uruguay y la propia Unasev, para brindar atención y contención a las víctimas de siniestros de tránsito a través de las Unidades Asistenciales Docentes en todo el país.

Por su parte, Agustina Cuadrado, referente del Área de Psicología y Tránsito en Unasev habló del papel que ocupa esta disciplina en el abordaje de la siniestralidad vial, sus detonantes y consecuencias. “Su objetivo es comprender el comportamiento humano en el tránsito; por qué toma determinadas decisiones; por qué enfrenta determinados riesgos”.

Cuadrado destacó “el factor humano” como una de las variables “más importantes, que hace referencia a las características generales de las personas. Esto quiere decir que no se trata de diferenciar a los individuos unos de otros, si no de comprender el comportamiento humano en general”.

A este respecto, la profesional se internó sobre lo que significa la vida después de los siniestros: “los daños que se producen luego de los siniestros, suponen amenazas tanto para la integridad física de las personas, como impactos psicológicos que van más allá de las lesiones físicas” señaló.

“Las personas jóvenes son las más afectadas por la siniestralidad vial; además de las secuelas físicas que dejan los siniestros, las secuelas psicológicas pueden ser peor, porque muchas veces los acompañan el resto de la vida” resumió.