Institución Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo

La instancia estuvo orientada a dialogar sobre acciones que permitan mejorar y garantizar el contacto entre las personas privadas de libertad y sus familias, especialmente en lo que refiere a las visitas y otras formas de vínculo.

Tomando en cuenta que se estima que cada detención afecta directamente a cinco personas del entorno cercano, que en su mayoría se trata de niñas, niños, adolescentes y mujeres, se buscó visibilizar el impacto social, económico y emocional que ocasiona la privación de libertad en el ámbito de la familia.

Participaron del encuentro la directora de la INDDHH, Jimena Fernández; la directora del INR, Ana Juanche; la presidenta de Familias Presentes, Gabriela Rodríguez; así como integrantes de la Asociación, de los equipos asesores, de dirección y responsables de varias de las principales unidades penitenciarias del INR,  y del Mecanismo Nacional de Prevención de la INDDHH. 

La actividad comenzó con palabras de las autoridades y una presentación audiovisual a cargo de la INDDHH, en la que se expusieron los principales obstáculos que deben afrontar las familias durante las visitas: extensas esperas a la intemperie, rechazo del ingreso de elementos de higiene o alimentos sin previo aviso y situaciones de malos tratos.

Posteriormente, representantes de Familias Presentes y del Mecanismo Nacional de Prevención abrieron el diálogo mediante una serie de interrogantes que permitieron conocer las acciones que el INR viene desarrollando en relación con estos temas. El intercambio concluyó con el compromiso de todas las partes de avanzar en la revisión del reglamento de visitas, desde una perspectiva de derechos humanos.

Reconocimiento a los derechos de las familias

En julio de 2025 la Comisión Interamericana de Derechos Humanos emitió la resolución 2/25 sobre los derechos de familiares y personas con vínculos afectivos de las privadas de libertad. La resolución establece que es deber de los Estados prevenir y combatir cualquier acción que promueva la discriminación y estigmatización de las y los familiares, facilitar visitas u otras formas de contacto y contemplar de manera especial la situación de niñas, niños y adolescentes. Asimismo, se reconoce que el apoyo familiar y las redes afectivas constituyen elementos esenciales para la reinserción social de las personas privadas de libertad.

En este marco, Familias Presentes y la INDDHH difundieron un material orientado a sensibilizar sobre las condiciones y barreras que enfrentan las familias durante las visitas en los centros de detención.