Compartir los cuidados nos acerca a la igualdad
¿Por qué esta campaña?
Elegimos frases cotidianas, que todos hemos escuchado o dicho en algún momento de nuestras vidas. Frases que muchas veces concebimos como positivas pero que en su construcción tienen incorporado el concepto de que solo las mujeres son responsables de cuidar a quienes lo necesitan.
Queremos impulsar un cambio cultural que nos permita compartir los cuidados de una forma más igualitaria. Así, lograremos que las mujeres tengan más oportunidades para desarrollar sus proyectos y los varones más posibilidades de involucrarse en las tareas que permiten que todas las personas tengamos una vida plena.
Porque tenemos que dejar de ver natural lo que no es. No se nace para cuidar, se hace.
¿Cuál es su objetivo?
Invitar a que nos cuestionemos quienes asumen la tarea de cuidar en nuestras familias y comunidades y, de esta forma, desnaturalizar la idea de que cuidar es solo cosa de mujeres.
¿En qué consiste?
Mediante intervenciones urbanas de gran tamaño, invitamos a reflexionar sobre cómo tenemos naturalizado que las mujeres son quienes cuidan. Las ilustraciones, colocadas en puntos estratégicos durante el mes de los cuidados (abril), son realizadas con una técnica que permite mostrar una “doble realidad” al mirarlas con un filtro azul y un filtro rojo.
En la web www.nosenacesehace.uy presentamos una batería de frases que tenemos naturalizadas y datos que evidencian las consecuencias de esta construcción cultural.
¿Qué es la corresponsabilidad de género?
Corresponsabilidad es compartir las tareas de cuidados entre varones y mujeres. Siendo corresponsables para cuidar, deconstruimos los roles tradicionales de género. De esta forma, los varones y mujeres participan en la misma medida en el trabajo no remunerado y tienen las mismas oportunidades para desarrollar su vida personal, familiar y laboral. Además, los cuidados compartidos favorecen el desarrollo integral de niñas y niños.
La corresponsabilidad apela también a transformar la conformación misma de las identidades de género en dos sentidos. Por un lado, apunta a la deconstrucción de estereotipos, mandatos sociales, mitos y creencias en torno a capacidades, espacios o roles de cada género. Por otro, busca hacer visible cómo esas construcciones generan desigualdades entre mujeres y varones. Implica, en definitiva, quebrar la división sexual del trabajo.