Intercambio con vecinos

Encuentro sobre dependencia con vecinos de Capurro

El Centro Pontevedrés de Montevideo recibió a vecinos y vecinas de la zona para conversar sobre las personas en situación de dependencia y los servicios que brinda el ministerio a toda la población. En concreto, se presentaron servicios y acciones del Sistema de Cuidados y del Programa Nacional de DIscapacidad (Pronadis/MIDES). La actividad fue organizada por el Consejo Vecinal 16, Municipio C y MIDES.
Participantes del encuentro de dependencia

Según explicó Patricia Cossani, adjunta a la dirección de la Secretaría de Cuidados, uno de los objetivos planteados es la promoción de la autonomía de las personas. Para eso, lo más importante es entender el concepto de personas en situación de dependencia. 

Esto implica que cada persona, para hacer las actividades cotidianas como comer, higienizarse o desplazarse, requiere de ayuda de otra persona. Se debe separar del concepto de discapacidad, dado que no toda persona con discapacidad tiene problemas de autonomía.

Para mejorar las condiciones de vida de las personas, se comentaron algunos de las principales propuestas con las que cuenta el MIDES. Desde el Sistema de Cuidados, se expuso los requisitos para acceder al servicio de asistentes personales para personas en situación de dependencia severa. Otras de las propuestas son los Centros de larga estadía. También se realiza el servicio de Teleasistencia en casa. Por su parte, Pronadis presentó el Centro Nacional de Ayudas Técnicas y Tecnológicas.

Testimonio

Rosario Baroncelli, vecina del barrio presente en la actividad, comentó que consultó al ministerio para poder ingresar al servicio de asistentes personales. Su madre y ella pidieron el servicio al comienzo del Sistema de Cuidados. Luego de un trámite rápido y una visita del personal técnico del MIDES, Rosario pudo contratar a una asistente. A ella le explicaron cómo hacer para contratar a alguien (que puede ser conocido o no, según se quiera), cómo hacer el pago, los aportes y hasta cómo hacer el despido. 

Rosario contó que por seis años tuvo que estar ella sola haciendo todo en su casa, pero además ella misma estaba con problemas de salud. Además del cansancio propio de las tareas, se le sumaban el estrés de atender las necesidades de una persona con dependencia. 

Atender las demandas a pesar de los estados de ánimo y la fatiga, evitar equivocaciones con la medicación o las fechas o cuidar los problemas de salud propios y ajenos, entre otras cuestiones cotidianas, son dificultades que sin ayuda van aumentando las sensaciones de agobio.

Cuando pudo acceder a la ayuda de una persona en su casa, su situación cambió. “Me sentí protegida”, manifestó. Esto le permitió desenvolverse con mayor tranquilidad y tener una compañía en la casa. Rosario asegura que esta ayuda le permitió mejorar la calidad de vida de su madre, hasta el momento en que murió a los 104 años. “Estas son cosas que no se pueden agradecer en palabras”, afirmó.

Etiquetas