El cáncer y la fertilidad

Dentro de la población en edad reproductiva, de menores de 40 años, los tumores más frecuentes son el cáncer de mama (5.6 %), de ovario (8 %), de cuello uterino (29 %), testículo (71 %), y en ambos sexos se ven con más frecuencia el cáncer colo-rectal (3%), melanomas (10 %), linfomas (17 %) y leucemias (20 %).
Los tratamientos contra el cáncer van mejorando a lo largo del tiempo, logrando mayor sobrevida pero, al mismo tiempo, la quimioterapia, radioterapia y la cirugía pueden comprometer la capacidad reproductiva de las personas, por lo que la fertilidad pasa a ser un tema de relevancia para niños, hombres y mujeres jóvenes con cáncer.
Con la inquietud de dar una solución a estas personas de manera de que además de sobrellevar el cáncer no vean truncadas sus posibilidades de ser padres a futuro, en julio de este año se aprobó en el Parlamento la modificación de la ley de Reproducción Humana Asistida vigente (N° 19.167), que mediante la incorporación de un inciso en el segundo artículo, ahora contempla también la técnica de criopreservación de gametos a todo paciente oncológico en edad reproductiva con el financiamiento del Fondo Nacional de Recursos (FNR).
Esta técnica, que consiste en congelar los gametos en condiciones óptimas para su posterior uso, es resultado de la unión de dos disciplinas: la oncología y la medicina reproductiva que dio lugar a la oncofertilidad, término que se utilizó por primera vez en 2007 para denominar al campo interdisciplinario que tiene como objetivo ampliar las opciones de fertilidad en los pacientes oncológicos.
Para determinar el riesgo de afectación de la fertilidad de los pacientes oncológicos en tratamiento se deben valorar varios factores del paciente y la enfermedad. En el caso de las personas, se debe tener en cuenta su edad, sexo, antecedentes personales, tratamientos previos a los que se haya sometido y pudieran alterar su capacidad reproductiva y sus antecedentes familiares. En cuanto a la enfermedad, se debe tener en cuenta el tipo de cáncer, su estadío, el compromiso directo de órganos reproductores, la urgencia del inicio de tratamiento y de cuál se trate.
Tienen derecho a informarse y hacer uso de esta prestación todos los pacientes oncológicos que reciban un tratamiento de pueda afectar la fertilidad independientemente de su estadío, de si tienen pareja o de si tienen hijos.