Día Nacional de la Prevención de la Prematurez

Lustemberg analizó la tendencia decreciente de la mortalidad infantil en nuestro país, lo que “requiere un salto cualitativo a partir de un enfoque multisectorial e interdisciplinario”. En cuanto a la importancia del proceso asistencial, agregó que “ninguna de estas cosas van a cambiar si perdemos nuestra vocación y empatía en la atención”.
La subsecretaria mencionó la importancia del trabajo que viene realizando el Ministerio de Salud Pública (MSP) en auditar el 100% de las historias clínicas de nacimientos prematuros severos en instituciones públicas y privadas, observando todo el proceso asistencial, con el fin de elaborar una guía junto a la Organización Panamericana de la Salud sobre recomendaciones en el embarazo y atención del prematuro, buscando estándares de calidad.
Desde el MSP se definieron los quince temas sanitarios prioritarios más importantes para el país, definiendo el mapa de ruta, objetivos estratégicos, acciones e indicadores para obtener resultados. La prematurez, mortalidad infantil y neonatal forman parte de esos problemas identificados.
En Uruguay, el 8,9% del total de nacimientos se producen prematuramente (2016) y el 1% del total de recién nacidos de todo el país tienen un peso al nacer inferior a 1.500 g (cerca de 500 niños al año). En el año 2016, hubo 47.049 nacimientos, por lo que el porcentaje equivale a 4.187 nacimientos de niños prematuros.
El 15% de los niños que nacen en el Centro Hospitalario Pereira Rossell llegan a este mundo en forma prematura, es decir, antes de las 37 semanas de gestación. La prematurez menor de 32 semanas es la que conlleva la mayor morbimortalidad neonatal y la mayor tasa de secuelas.