Enfermedades no transmisibles presionan sobre recursos en salud que podrían destinarse a políticas públicas

Anualmente mueren por enfermedades no transmisibles unas 4,3 millones de personas, de las cuales el 35 % pertenece al grupo etario de entre 30 y 69 años. Los países latinoamericanos destinaron 238.000 millones de dólares en 2005 para cubrir los gastos generados por enfermedades no transmisibles, como las afecciones del corazón, pulmones, diabetes y cáncer.
La atención a estas enfermedades aumenta el uso de los servicios sanitarios, los gastos sociales en este rubro, los porcentajes de los presupuestos nacionales destinados a tal fin y disminuyen el crecimiento económico. Muchas de estas enfermedades podrían evitarse y así destinar esos recursos a políticas sociales para mejorar el trabajo o la vivienda o profundizar las políticas educativas.
“Cada aumento del 10 % de estas enfermedades está asociado a una baja de medio punto porcentual de la tasa anual de crecimiento”, puntualizó Vázquez, durante su alocución frente a los mandatarios en la Cumbre del Mercosur, que se desarrolla en Mendoza, Argentina.