Saber reanimar también es salvar

El 80 % de los paros cardiorespiratorios ocurren fuera del ámbito hospitalario, en espacios públicos o en el hogar. El paro cardiorrespiratorio (PCR) es una interrupción repentina de la actividad del corazón, que se evidencia por la falta de pulso, respiración y respuesta de la persona. Si los intentos de reanimación no tienen éxito, se habla de muerte súbita (MS), una condición que, en la mayoría de los casos, aparece sin previo aviso ni síntomas.
Los primeros 10 minutos son determinantes para salvar la vida de una persona que sufre un paro cardiorespiratorio. Por cada minuto que pasa sin iniciar maniobras de reanimación, las probabilidades de sobrevivir disminuyen un 10 %. Por eso, es fundamental comenzar el masaje cardíaco cuanto antes. Si quienes presencian el evento actúan rápidamente y además utilizan un Desfibrilador Externo Automático (DEA), las chances de supervivencia pueden superar el 50 %.
La Comisión Honoraria para la Salud Cardiovascular desarrolló una app llamada CERCA que georreferencia los Desfibriladores Externos Automáticos disponibles en el país, ofrece guías e información sobre reanimación y permite llamar al 911 directamente desde la app.
En este Día Nacional de la Resucitación Cardíaca, se recuerda que la supervivencia ante un paro cardíaco depende de una serie de acciones encadenadas que deben realizarse en el menor tiempo posible. Esta cadena de supervivencia incluye:
- Reconocer la situación.
- Llamar de inmediato al servicio de emergencia.
- Iniciar el masaje cardíaco y utilizar un Desfibrilador Externo Automático (DEA), si hay uno disponible.
- Brindar asistencia médica a través de una emergencia móvil.