No tan distintos: Estonia, Uruguay y el gobierno digital

Una de las charlas más originales del 8º Encuentro Nacional de Gobierno Digital fue la titulada “Estonia: un caso de éxito en materia de gobierno digital”, a cargo de Andres Kütt, representante del gobierno estonio, uno de los países líderes en el mundo en materia de gobierno digital.
Andres Kütt comenzó hablando de Estonia, un país desconocido para muchos de los presentes. Dijo que se trata de un país frío ubicado en el norte de Europa, con mucha niebla, rodeado de paisajes naturales, con un territorio más chico que el uruguayo y la mitad de su población, pero que tiene, sin embargo, una cantidad de aspectos similares a Uruguay, por lo cual es posible pensar en instancias de aprendizaje recíproco.
En su opinión, la experiencia en materia de gobierno digital de Estonia fue sumamente favorable en múltiples sentidos, en especial, reduciendo la burocracia, lo que ha permitido mejorar no solo los servicios que ofrece el Estado, sino también la calidad de la democracia. En Estonia, los beneficios del gobierno digital son tangibles y concretos; se puede llegar a la certeza de que es un proceso útil para el Estado y que, a nivel nacional, es incluso un tema de sobrevivencia y apoyo a la independencia nacional. Pero también aclaró que ese proceso fue largo, ya que los sistemas de información solo brindan valor dentro de un contexto más general, donde son necesarios marcos legales y administrativos y personas eficientes que los administren.
En la actualidad, en Estonia se cree que el gobierno mismo debe ser digital; hay un concepto cultural del gobierno como un fenómeno digital, que ha debido imponerse a un escepticismo histórico de los habitantes del país hacia el gobierno. En el país de Kütt, los gobiernos han cambiado de forma permanente, se han sucedido unos a otros, pero las personas igual deben continuar sus vidas cotidianas, por lo cual el gobierno digital se ha convertido en una herramienta fundamental para permitir la estabilidad dentro de la transformación continua. Y agregó que los indicadores actuales de Estonia en materia de gobierno digital se deben a tres pilares fundamentales: un nuevo concepto del Estado como hecho digital, un conjunto de personas aptas para liderar ese proceso y una infraestructura acorde a las exigencias que tales proyectos demandan.
Asimismo, Kütt hizo referencia a las políticas sociales de Estonia y a la distribución de gastos de su presupuesto nacional, como forma de interiorizar a los presentes acerca de determinadas decisiones políticas relacionadas con la implementación del gobierno digital. Hay una apuesta constante a la innovación, la mejora, el desarrollo de sistemas informáticos y la protección y defensa de la sociedad digital. También habló de la Agencia de Sistemas de Información (lo que sería el sucedáneo de Agesic en Uruguay) y del modelo arquitectónico de los sistemas de información de Estonia, el cual apuesta, entre otros valores, a la identidad electrónica, a la interacción de las personas con el gobierno, a la mejora de la experiencia de usuario y a reforzar un concepto que consideró decisivo: comprender que quien paga los impuestos es un cliente del Estado. Asimismo, hizo referencia a algunas características del gobierno digital estonio, como la descentralización, la escalabilidad, la defensa de la privacidad y el establecimiento de puntos de datos en países vecinos, llamados “embajadas de datos”.
Para finalizar, Andres Kütt hizo referencia algunos principios claves de la implementación del gobierno digital en Estonia que podrían ser de utilidad para Uruguay, como por ejemplo, pensar en términos de ecosistemas digitales y no de software, apostar a los sistemas y procesos abiertos e intentar siempre, de forma constante, dar pequeños pasos con el objetivo de alcanzar un resultado global: el establecimiento, consolidación y avance del gobierno digital. Antes de despedirse, Kütt también respondió brevemente algunas consultas que los participantes hicieron llegar a través de Twitter, relacionadas, en general, a las similitudes y diferencias entre las experiencias de Uruguay y Estonia en materia de uso de las TIC e implementación de gobierno digital.