Seminario iberoamericano sobre prevención y abordaje de situaciones de violencia hacia las personas mayores

La actividad se realizó este miércoles 25 de junio y fue posible gracias al diseño y coordinaciones del Departamento de Capacitación y Sensibilización de Inmayores. El seminario se hizo en formato híbrido: la modalidad presencial tuvo lugar en la Sala Idea Vilariño, Complejo Torre de las Telecomunicaciones de Antel; y la modalidad virtual se transmitió a través del canal de youtube @midesuy para facilitar la llegada a todas las personas mayores y público interesado.
La mesa de apertura y bienvenida contó con la participación del ministro de Desarrollo Social, Gonzalo Civila; la directora del Instituto Nacional de las Personas Mayores del Ministerio de Desarrollo Social, Marianela Larzábal; y la referente del Centro Interdisciplinario de Envejecimiento de la UdelaR, Lucía Bogliacini.
A su vez, participaron la secretaria de la Secretaría de Derechos Humanos de Presidencia, Collete Spinetti; el director de Programas Especiales de la Secretaría General de OISS, Holman Jiménez; el técnico de Programas Guillermo Ávila Medrano; entre otras y otros técnicos nacionales e internacionales (Argentina, Paraguay, México, España) que abordaron las temáticas de Género y Cuidados; Abuso y maltrato; Experiencias y/ o vivencias desde las personas mayores de la sociedad civil; entre otras.
Fortalecer las capacidades colectivas frente a las violencias
Civila valoró profundamente el trabajo de los equipos técnicos de Inmayores, liderados por Marianela Larzábal, y resaltó la lucha constante de los colectivos de personas mayores en todo el país. Estos colectivos, agrupados de diversas maneras en todo el territorio, enfrentan el flagelo de la violencia hacia las personas mayores, un problema que está estrechamente vinculado con otras formas de violencia estructural, como la desigualdad y la pobreza, así como con la violencia generacional, que se expresa con fuerza en Uruguay.
Desde el inicio de su gestión, las autoridades han puesto énfasis en promover políticas sociales comunitarias. Para Civila esto implica involucrar a todos los actores de la comunidad en la construcción de sociedades más justas e inclusivas en el entendido que las acciones para transformar la realidad social deben ser un esfuerzo conjunto entre el Estado y la sociedad civil, reforzando la responsabilidad del Estado de garantizar derechos, alineados con los marcos normativos vigentes, y fomentando cambios culturales que permitan que esos derechos se conviertan en hechos concretos.
Es fundamental que la comunicación cotidiana, las palabras y acciones de todos los actores sociales, contribuyan a reducir, y no a generar ni amplificar la violencia. La experiencia acumulada por los colectivos de personas mayores y las instituciones que los acompañan debe ser valorada y puesta en perspectiva, como parte de una reflexión que involucra también a la región. Estos esfuerzos ayudan a aprender de otros países y fortalecer las estrategias de protección y respeto hacia las personas mayores. A su vez, es un compromiso que recae en los gobiernos para construir sociedades más inclusivas y respetuosas.
Marianela Larzábal indicó que existen diferentes tipos de violencia y que no se puede tratar a la población de personas mayores de manera homogénea. Para abordar la problemática de las violencia, es necesario promover buenas prácticas, reconocer la pluralidad de experiencias y visibilizar las violencias que muchas veces permanecen imperceptibles porque las personas mayores no denuncian. La necesidad de capacitación, difusión y sensibilización son aspectos clave que requieren un trabajo articulado, coordinado y colaborativo entre la sociedad civil y las instituciones.
“Ojalá, tanto en Uruguay como en otros países de la región y del mundo que enfrentan esta problemática, se deje de reproducir estereotipos, mitos y prejuicios hacia las personas mayores, que dejemos de ser sociedades viejistas", dijo Larzábal y agregó que esos prejuicios están tan naturalizados, que muchas veces no se logra percibir su magnitud.
El seminario internacional «Estrategias para la prevención y abordaje de situaciones de violencia hacia las personas mayores» representa una oportunidad clave para promover la protección y el respeto de los derechos de las personas mayores en la región. En línea con los compromisos internacionales en materia de derechos humanos, este espacio busca reflexionar sobre estrategias y enfoques integrales para abordar la violencia, entendida como un problema estructural que muchas veces pasa desapercibido y que requiere respuestas coordinadas y basadas en los derechos. “Solo así será posible generar respuestas efectivas y garantizar los derechos de las personas mayores en todos los ámbitos”, reflexionó Larzábal.
Violencia intrafamiliar
De acuerdo a los datos proporcionados por el Servicio de Atención a Personas Mayores en Situación de Abuso y/o Maltrato del Instituto Nacional de las Personas Mayores (Inmayores), de 178 situaciones aceptadas, el 79,1 % de las personas afectadas eran mujeres. De los casos recibidos, el 48% eran personas mayores de 79 años y el promedio fue de 78 años. El maltrato ha sido de orden psicológico (54,2%), seguido por el maltrato físico (42,4 %), el abandono (31,6%) y, en menor medida el abuso patrimonial, que constituyó el 18,6% de las intervenciones realizadas. El 44,6% de las personas sufrió un tipo de abuso y/o maltrato y el 42,4 % dos. La mayor parte de las agresiones son ejercidas por personas allegadas, sobre todo de hijos e hijas.