Comportamiento ético y comportamiento empático
¿Qué es la empatía? Esta palabra que aparece con cada vez más frecuencia refiere a la capacidad de ponerse en el lugar de los demás. Un comportamiento ético y empático implica tener conciencia de que todo lo que se dice o se hace puede afectar a otras personas. Si se es amable y hay respeto, se construyen relaciones diferentes que cuando hay agresión, actitudes despectivas o se ignora a las otras personas.
En internet sucede lo mismo. Las acciones en las redes, los comentarios y la forma en que se actúa también tienen efectos sobre la vida cotidiana de las personas y su entorno. Si se entiende que se puede lastimar o herir, será así tanto para una pelea en la calle como una en un chat. Ser sensibles a los sentimientos de otras personas es una habilidad humana necesaria para hacer de internet un espacio más habitable, que permita el desarrollo como personas y crecer como sociedad.
Como vemos, el ámbito digital no es menos real que el mundo físico. A veces sucede que el anonimato y la ausencia física de la persona con quien se habla producen una desconexión con sus sentimientos y expresiones. La forma en que se construye el diálogo es asincrónica, y en ocasiones una conversación se confunde con un monólogo. Pensar este intercambio en una situación cara a cara puede dar una pauta para comprender la distinción. ¿Se actúa de la misma forma sentados en un bar que detrás de la pantalla del celular?
Recursos relacionados con esta habilidad:
“A través de una pantalla nos podemos lastimar… Con solo hablarnos mal… Por querer hablarnos más”
Así dicen algunas estrofas de “Guardemos distancia, también en las redes”, el rap que forma parte de una campaña que lleva adelante el Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU) con el apoyo de UNICEF. La letra de la canción refiere a lo que se hace en internet y cómo puede afectar a otras personas si no se ejerce una de las habilidades más importantes de la comunicación humana: escuchar, ser respetuosos y empáticos con las personas que compartimos el entorno digital.
Cyberbullying
"Sos inservible”, “*****”, “Vos y tus amigos van a recibir lo que se merecen”, son solo algunas de las frases intimidatorias, humillantes y agresivas que pueden darse en una conversación en un entorno digital. El maltrato sostenido de una o varias personas contra un par en internet se llama ciberbullying o ciberacoso. Sentimientos como la vergüenza, angustia, tristeza y la baja autoestima afectan el desenvolvimiento de quien lo sufre y, en muchos casos, el mundo virtual replica lo que ya sucede en el mundo físico.
El ciberbullying es un problema muy grave y trae consecuencias negativas para todas las personas involucradas, no sólo para quien recibe la agresión. En esta infografía de Chicos.Net podés recorrer la problemática y reflexionar sobre cuál es el papel de las personas adultas.
Veamos cómo se analiza el fenómeno y cómo afecta a infancias y adolescencias al tiempo que se ofrecen estrategias posibles para actuar en esta situación.
Charla sobre Bullyng, de la culpa a la vergüenza
La antropóloga Paula Sibilia profundiza sobre cómo funciona esta práctica en los entornos digitales, las diferencias con el mundo físico y cuál es el impacto en aquellos que la sufren. Accedé a la charla Bullyng, de la culpa a la venganza
Sexting: Del inglés “Sex” (sexo) y “Texting” (envío de mensajes de texto)
El fenómeno del sexting consiste en la producción de fotos, videos o sonidos íntimos, situaciones de índole sexual o erótica que se envían de celular a celular o se publican en redes sociales. En sí misma, la práctica no es un problema si es consensuada por quienes producen estas imágenes.
Cuando no es consensuada puede volverse un problema. Se produce un daño cuando ese contenido se comparte o viraliza sin consentimiento de quien allí aparece y con el propósito de afectar negativamente a la persona.
Al salir del ámbito privado sin consentimiento, el sexting puede conducir a la violencia de género:
- La mayoría de las víctimas son mujeres, a las que se les adjudica responsabilidad por haberse tomado las fotografías o videos.
- En estos casos, se invisibiliza la responsabilidad de las personas que comparten o publican las fotografías, videos o audios sin consentimiento.
- La mayoría de los casos son varones quienes lo hacen. Las claves para que esto no suceda son respetar el consentimiento, el cuidado y la responsabilidad.
En estas situaciones es importante reflexionar y preguntarse: ¿el problema fue el envío inicial o el reenvío posterior? Esta pregunta es fundamental para hacer foco en quien distribuye con la intención de dañar y no en quien o quienes resultan víctimas de su mala intención. Podés consultar esta guía para ampliar sobre el tema.
Discursos de odio
Es una de las formas más actuales de racismo y discriminación que se extiende en internet y las redes sociales. El Comité de Ministros del Consejo de Europa (1997) lo define como “toda forma de expresión, que difunda, incite o justifique el odio racial, la xenofobia, el antisemitismo u otras formas de odio basadas en la intolerancia” y reconoce que también afecta a la “orientación sexual, creencias religiosas o identidad de género”. Los llamados haters (“odiadores”) han proliferado en las redes sociales y, amparados en el anonimato o las identidades falsas, llenan de mensajes agresivos y discriminatorios la web. Cualquier tema se convierte en foco de conflicto y demuestra la falta de respeto, empatía y tolerancia. En el video ¿Crees que las personas son más agresivas en medios digitales? podemos escuchar opiniones y comentarios en relación a este fenómeno.
Guía de sensibilización sobre convivencia digital
Esta guía informativa creada por UNICEF sobre cuidados en la cultura digital busca ser una herramienta de apoyo para que docentes, referentes y familias acompañen y promuevan una convivencia digital respetuosa y fomenten la construcción de la ciudadanía digital.