Conferencia AS/COA

Arbeleche: El gobierno está avanzando en una ambiciosa agenda de reformas

Al cerrar la conferencia sobre oportunidades de inversión en tecnología en Uruguay convocada por la Americas Society/Council of the Americas (AS/COA) la ministra de Economía Azucena Arbeleche repasó la actuación del gobierno durante la pandemia, a la vez que resaltó las bases para la reactivación económica y destacó el proceso de reformas estructurales que se viene implementando. Dichas reformas buscan “alcanzar una economía más estable y virtuosa, que impulse la inversión, la creación de puestos de trabajo y la mejora en los ingresos de los hogares, al tiempo que nos permita sostener y mejorar las políticas sociales”, expresó.
Conferencia AS/COA

Durante la conferencia participaron el ministro de Industria y Energía y Minería Omar Paganini, la presidenta de AS/COA Susan Segal, así como los empresarios del sector tecnológico Nicolas Jodal, Martín Migoya y Jacobo Singer.

En su alocución, la ministra de Economía destacó que el plan de vacunación desarrollado por Uruguay ha jugado “un rol fundamental en la evolución de la pandemia, y hoy Uruguay tiene una de las estrategias de inmunización más rápidas y abarcativas del mundo”, lo que ha permitido una mejoría notoria en relación a los efectos del Covid 19.

Arbeleche informó que “el ritmo de vacunación en Uruguay está a nivel de los más altos del planeta”, alcanzando una vacunación diaria de aproximadamente el 1,2 por ciento de la población. “Si mantenemos este ritmo -exprresó- podríamos haber inmunizado con dos dosis a toda la población objetivo para fines de agosto”. También recordó que “Uruguay fue el primer país en comenzar con la vacunación a los adolecentes, y esta semana vamos a anunciar la disponibilidad de la tercera dosis para toda la población, de manera de reforzar lo que habíamos hecho”.

Para la cartera de Economía, “la política de vacunación es una de las principales políticas económicas y sociales. Porque nos pone más cerca de la normalización de las actividades económicas, sociales y culturales de la población y también de la deseada apertura plena de nuestras fronteras”, subrayó Arbeleche.

El rol del sector privado en la inversión y el crecimiento en la reactivación económica

La secretaria de Estado comunicó que “en este momento, tenemos varios indicadores de actividad que nos hacen pensar que la economía ya ha entrado en un sendero de recuperación. Entre estos destaco las exportaciones de bienes, la actividad agropecuaria, el sector construcción y también la producción industrial. El hecho de que el gobierno haya optado por no ir por el camino del confinamiento obligatorio como respuesta a la pandemia ha permitido que los motores de la economía se mantuvieran encendidos en todo este tiempo”.

“Esta nueva Administración ha puesto foco desde el inicio en impulsar la recuperación económica a través de la atracción y la promoción de la inversión privada, tanto a la doméstica como a la extranjera. Sabemos que Uruguay cuenta con una amplia gama de esquemas de apoyo y promoción a la inversión, y durante esta Administración se han introducido cambios en el marco legal que brindan mayor flexibilidad y también mayor monto en los incentivos fiscales para los proyectos de inversión para todos los sectores, para todos los tamaños y también para los proyectos de construcción de gran porte y los referidos a las viviendas sociales”, explicó.

La ministra puso énfasis en que “nuestro objetivo es que esta recuperación sea sostenible; es decir, que podamos conjugar por un lado el crecimiento de corto plazo, la generación de empleo -que hoy es nuestro desvelo-, y la mejor condición de vida para los uruguayos, pero por otro lado inversiones que potencien las energías renovables, en tecnologías limpias, y que se contemplen objetivos nacionales en la mitigación de la emisión de gases de efecto invernadero y de adaptación al cambio climático”.

Reformas estructurales y responsabilidad fiscal

“Desde marzo del 2020 la pandemia ha sido el centro de nuestras preocupaciones y la estrategia del gobierno ha estado enfocada en preservar la vida y la calidad de vida de nuestra población. Uruguay ha destinado todos los recursos necesarios a traves del Fondo Coronaivirus para proteger a los sectores más vulnerables -dijo Arbeleche-. Pero no solamente nos hemos ocupado de atender la pandemia, sino que el gobierno siempre ha estado con las luces largas puestas, manteniendo la perspectiva de mediano plazo”, añadió.

“El gobierno ha avanzado y está avanzando con una ambiciosa agenda de reformas que esté respaldada por una mayoría política en el Parlamento. Reformas que procuran cambiar las características fundamentales de nuestra economía y cuyo común denominador es alcanzar una economía más estable y virtuosa, que impulse la inversión, la creación de puestos de trabajo y la mejora en los ingresos de los hogares, al tiempo que nos permita sostener y mejorar las políticas sociales”, subrayó Arbeleche.

“Algunas de estas reformas son la institucionalidad fiscal, con un componente que quisiera destacar, y que su punto más destacable es el establecimiento de una regla fiscal. Este nuevo marco fiscal busca garantizar que las finanzas públicas estén saneadas en el mediano plazo. Pese a la pandemia disruptiva, Uruguay ha cumplido con todas las metas fiscales que se ha propuesto: el déficit observado y también a los tres pilares incluidos en la nueva institucionalidad fiscal: el resultado estructural -de la mano de la sostenibilidad de las políticas, en particular las políticas sociales-, el crecimiento topeado del gasto del gobierno central y el endeudamiento posible del gobierno central”, detalló la ministra. Y agregó que “el cumplimiento de todas estas metas refuerza la credibilidad de las políticas públicas en un manejo dentro de un marco de alta incertidumbre”.

“Hèmos avanzado en reformas microeconómicas, para impulsar el producto potencial, y mejorar el clima de negocios y la competitividad, como son los cambios en el marco regulatorio del mercado energético y la promoción de competencia en los sectores no transables”, indicó. “Otra reforma de gran importancia, es la reforma de la seguridad social, que es central para mejorar la equidad intergeneracional y para asegurar la sostenibilidad financiera de nuestro sistema de pensiones”, dijo.

“Una cuarta reforma de importancia vital, es la nueva estrategia de inserción internacional. Nos proponemos tener un Mercosur más flexible, moderno, para que todos los países de bloque puedan avanzar de la forma que estimen más conveniente. Uruguay ha sido muy claro en el ámbito del Mercosur, ha declarado que su decisión es acercarse a negociar con terceros países. En un mundo donde la inclinación es hacia el cierre de fronteras y hacia las medidas proteccionistas, Uruguay reafirma su vocación de abrirse al mundo y pregona la libertad comercial dentro del multilateralismo”, reflexionó Arbeleche.

Como punto final, la ministra destacó “el impulso al desarrollo del mercado de capitales. A través de un relanzamiento de la Comisión de Promoción del Mercado de Valores estamos entrando en el foco en este tema. Queremos sentar las bases para contar con un sistema financiero capaz de poder atraer y canalizar flujos inteligentes de capital local e internacional que apoyen la innovación y la reconversión de sectores y actividades económicas, y que sea compatible con el desarrollo sostenible en un mundo pospandemia”.

El impulso a la inversión extranjera directa

La titular de Economía hizo hincapié en que “el gobierno de Uruguay tiene vocación de atraer inversión extranjera directa (IED) de calidad. Dos grandes plataformas en los que hemos visto IED en el país son, por un lado, el comercio y servicios, las actividades de hub y el soporte al comercio y las operaciones en la región, el trading, la logística, los servicios financieros, los centros de servicios compartidos, a los headquarters regionales. Y por otro lado, la producción e innovación: actividades de producción de software, manufacturas varias, la industria farmacéutica y los agronegocios. Además de contar con un régimen de beneficios fiscales pro inversión, también tenemos muchos factores que hacen que Uruguay sea un destino atractivo para la IED en distintos sectores productivos”.

“Por un lado Uruguay sigue siendo un bastión de estabilidad institucional y política en América Latina. Uruguay es una de las democracias más fuertes de la región y del mundo, con un gran involucramiento cívico. En los últimos 35 años el gobierno ha estado conformado por distintos partidos políticos, por distintas coaliciones, sin convulsiones políticas, y con transiciones ordenadas que no han afectado en absoluto la estabilidad económica, la independencia judicial y el respeto de los contratos”, insistió la ministra Arbeleche. Y agregó que “en Uruguay se puede proyectar a largo plazo, eso es parte de la identidad de nuestro país, serio, predecible, estable, con bajo nivel de corrupción”.

Además, la ministra destacó que “Uruguay tiene la menor prima de riesgo soberano de toda Latinoamérica, menor aun que los países con mejor calificación crediticia. Varias características distintivas del ambiente de negocios han sido destacadas en un informe reciente del Departamento de Estado de Estados Unidos, sobre el clima de negocios en Uruguay. Entre ellas se destacó la igualdad de trato para extranjeros y locales; que no se requiere una contraparte local para invertir; que hay libre mercado de cambios y ninguna restricción para la repatriación de ganancias; un sistema impositivo único en todo el país; una legislación moderna en términos corporativos; intereses minoritarios en la distribución de dividendos y la gobernanza corporativa”.

“Uruguay se ha convertido en un centro de negocios digitales de primer nivel, que explica la consolidación que hemos tenido como exportador de servicios globales en el mundo. Y ejemplo de esto es que Uruguay ha sido clasificado como mejor país en América Latina en términos de desarrollo de telecomunicaciones y está en el grupo de elite de Digital Nations de los países más avanzados a nivel mundial en materia de desarrollo digital”, prosiguió.

“En suma, Uruguay está en una fase de recuperación pospandemia que se asienta en un orden macroeconómico basado en reglas, en un marco de respeto por la democracia, en una eficiente asignación de recursos, en una apertura económica y comercial y en el rol clave del sector privado como motor de este crecimiento. El Estado debe apoyar el desarrollo del sector privado para que el país pueda crecer y podamos generar empleo genuino. El Estado tiene a su vez la responsabilidad de sostener las políticas que protejan a las personas más vulnerables de manera que se le dé la oportunidad de desarrollarse como personas. Necesitamos un crecimiento que incluya a todos y a toda la población, y que también mire y respete las generaciones futuras”, concluyó Arbeleche.

 

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