Uruguay emite bono global en pesos nominales a la tasa más baja desde que accede a los mercados internacionales
I. Objetivos de la operación
Completar el programa de fondeo del gobierno en el mercado internacional para el año en curso.
Apuntalar el proceso de desdolarización de la deuda del gobierno.
Continuar desarrollando el mercado secundario de bonos en moneda local, estableciendo un nuevo bono de referencia (benchmark) en UYU para un plazo de 10 años.
II. Diseño de la transacción
La transacción se ejecutó durante el curso del día de hoy y comprendió:
La emisión de un nuevo bono global en UYU con vencimiento en el año 2035.
La reapertura de bono global en dólares con vencimiento final en el año 2037.
Los inversores tenían la opción de comprar el bono global en pesos utilizando distintas formas de pago: (i) efectivo, (ii) bonos globales en UYU de menor madurez (con vencimientos 2031 y 2031) y/o iii) títulos domésticos (Notas de Tesorería en UYU o Letras de Regulación Monetaria del Banco Central). El bono global en dólares sólo se podía comprar con efectivo.
Por segunda vez en una transacción global soberana, se habilitó la opción para que inversores residentes y no residentes pudiesen integrar las Letras de Regulación Monetaria del BCU (junto a las Notas del Tesoro) como forma de pago para comprar el Bono Global denominado en pesos. La implementación de este mecanismo financiero y la estrategia de comunicación a inversores, requirió de una estrecha coordinación entre el MEF y las áreas técnicas y operativas del BCU.
Los bancos colocadores que participaron en esta operación fueron Bank of America, HSBC e Itaú BBA.
III. Resultados
La emisión total conjunta alcanzó el equivalente a US$ 1.850 millones, de los cuales US$ 1.350 millones fueron del nuevo Bono Global en Pesos a tasa fija nominal (UYU) y US$ 500 millones correspondieron a la reapertura del Bono Global en Dólares (USD).
La demanda total por ambos bonos (incluyendo la demanda por canje con títulos globales en UYU de menor plazo) alcanzó un máximo de US$ 3.835 millones equivalente.
Del total emitido del Bono Global en Pesos, US$ 1.250 millones fueron del libro de órdenes considerado como efectivo. El monto restante (US$ 100 millones) será utilizado para el canje por bonos globales en UYU de menor madurez.
La emisión del nuevo bono global en UYU se realizó a un rendimiento de 8 % anual, lo que supone la menor tasa fija nominal en pesos alcanzada en una emisión global en pesos.[1]
La reapertura del Bono Global en USD se realizó a un rendimiento de 4,73% anual. El diferencial sobre el bono de referencia del Tesoro de Estados Unidos en ese plazo (prima de riesgo) fue de 78 puntos básicos (0,78% anual). Esto representa el spread más bajo pagado por Uruguay para una emisión de un bono global en dólares.[2]
____________________
[1] La tasa fija más baja pagada en un bono global en pesos nominales hasta el momento había sido de 8,25% anual, en el Bono Global en pesos a 10 años ejecutado en 2021, con un monto emitido por efectivo de US$ 750 millones equivalente.
[2] El spread más bajo en la tasa de rendimiento pagado por una emisión internacional en dólares de Uruguay hasta el momento había correspondió a la reapertura del bono 2031 en dólares, en mayo de 2021. En ese momento, el spread fue de 80 puntos básicos sobre la referencia de Estados Unidos del momento, y un monto emitido fue de US$ 574 millones.