Beneficios de la lactancia materna

La leche materna con todos sus beneficios es así, probablemente la intervención sanitaria que, con menores costos económicos, consigue los mayores beneficios para la salud del individuo. Ya en el año 2002 la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Fondo Internacional de Emergencia de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) adoptaron la estrategia mundial para la alimentación óptima del lactante y el niño con la recomendación de iniciar el amamantamiento en la primera hora de vida del bebé para luego continuar de forma exclusiva con la leche materna hasta al menos los seis meses de vida, luego complementada con otros alimentos adecuados hasta los dos años o más.
La leche materna tiene varias virtudes en relación a lo que le brinda al niño, entre las que se encuentra un gran número de inmunoglobulinas (defensas) que los protege de las diarreas, neumonías e infecciones a los oídos y se asocia a un 64% de la reducción en la incidencia de infecciones gastrointestinales inespecíficas. Además, tiene un efecto protector residual hasta dos meses después de suspendida la lactancia.
El recién nacido no tiene el sistema inmunitario del todo maduro, por lo que el amamantamiento en la primera hora de vida reduce en casi un 20% el riesgo de fallecimiento en el primer mes de vida y disminuye en un 72% el riesgo de hospitalización a raíz de infecciones respiratorias en aquellos bebés que son alimentados con leche materna al menos durante los cuatro primeros meses de vida.
El hecho de amamantar no solamente beneficia a los bebes, sino que también tiene consecuencias positivas directas sobre la mujer que la realiza.
En general se tienen en cuenta, o están más presentes, los beneficios emocionales del amamantar y eso es lo primero que resaltan las madres según explica la Dra. Analhi Mogni, pediatra y presidenta del Comité de Lactancia de la Sociedad Uruguaya de Pediatría. Uno de ellos es el sentimiento de acercamiento, calma y realización que siente la madre, luego del trabajo de parto y del parto, cuando el bebé se acopla y empieza a succionar, pero también hay otros beneficios físicos que acompañan.
Durante la lactancia se libera la hormona oxitocina que ayuda a que el útero vuelva a su tamaño regular más rápidamente, así como puede reducir el sangrado post parto. Esto hace que la madre pueda recuperarse del parto de forma más rápida.
La experiencia acumulada de lactancia se correlaciona con una reducción tanto en el cáncer de mama (principalmente pre menopáusico) como en el de ovario y algunos estudios han descubierto que puede reducir el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2, artritis reumatoide y enfermedades cardiovasculares, inclusive alta presión arterial y alto colesterol.
La lactancia materna brinda una experiencia emocional única para la madre y el bebé.