Emergencia sanitaria

Taller virtual sobre comunicación e información en tiempos de riesgo mundial

El 26 de marzo de 2020 la Oficina de Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres (UNDRR), desde su Oficina Regional para Las Américas y El Caribe​, realizó un taller virtual denominado “Comunicar e informar en tiempos de riesgo mundial”.
afiche sobre taller virtual

LA UNDRR vela por un futuro más seguro y sostenible trabajando para reducir el riesgo de desastres y las pérdidas ocasionadas por éstos. Esta oficina supervisa la implementación del ​Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres 2015-2030 dando apoyo a los países en su implementación, monitoreo y capacitación.

El taller “Comunicar e informar en tiempos de riesgo mundial” se orientó a periodistas y comunicadores que enfocan sus tareas en la gestión de riesgos de desastres. Se realizaron dos sesiones, una primera introductoria de la temática y el enfoque del Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres 2015-2030 que se denominó “Pandemia y el Riesgo Sistémico”. Sus expositores fueron Raúl Salazar (Jefe de la Oficina de Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres (UNDRR), Oficina Regional – Las Américas y El Caribe) y Carlos Uribe (Oficial del programa de Conocimiento de Riesgo de la Oficina de Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres (UNDRR), Oficina Regional – Las Américas y El Caribe).

La segunda sesión “Comunicación en tiempos de riesgo” la orientó Brigitte Leoni (Oficial Senior de Comunicaciones de la Oficina de Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres (UNDRR), Oficina Sede en Ginebra, Suiza) y versó sobre el abordaje de crisis desde el punto de vista de la comunicación y la información, exponiendo cuales son los principales actores en los programas de reducción de riesgo y que funcionan, a su vez, como fuente de información y de comprensión de la situación presente y hacia el futuro.

El taller

Raúl Salazar inició con una reflexión sobre el cambio cultural que genera la pandemia y destacó que el Marco Sendai ha permitido que muchos países estuvieran mejor preparados para esta situación.

Destacó que “esta crisis revela la necesidad de revisar la salud pública y la inclusión a los servicios como tema central. Pensamos que este va a ser un eje de la reflexión hacia la construcción de resiliencia en el mediano plazo frente a la recurrencia o fases de esta epidemia”. El énfasis reflexivo estará también en cómo blindamos de estos riesgos a nuestras sociedades en el futuro, y cómo el cambio cultural a raíz de esta situación debe ser promovido por los medios de comunicación.

Este análisis reflexivo deberá ser multidisciplinario y de largo plazo respecto a la resiliencia conjunta de los países. El COVID-19 se transformó rápidamente en un riesgo sistémico que amenaza más allá de un sector (salud, comercio, turismo, etcétera).

Los países están presentando una respuesta bastante integrada y multilateral a la pandemia, dónde se comparten experiencias que permiten acortar tiempos de respuesta. El ideal es que la información recogida sea desagregada por género, discapacidades, edades, etcétera. Cuantos más datos podamos desagregar mayor será la información para prepararse y desarrollar resiliencia.

Salazar explicó que “los países están modulando sus respuestas principalmente en: atención a personas afectadas y detección de casos. Por otro lado, todas coinciden en las medidas de distancia social. Cada uno responde a fases y nivel de casos detectados y las respuestas varían desde cuarentenas totales a cuarentenas por fases. La recomendación y llamado de OMS es de implementar medidas agresivas para encontrar, aislar, hacer pruebas y trazar contactos de personas que han sido afectadas”.

Los expositores destacaron que el sector privado cumple un rol central y es necesaria su asociación con el sector público para construir la resiliencia a futuro. Cualquier análisis de crecimiento a futuro deberá considerar qué medidas toma el sector privado. Actualmente vemos que en algunos países participa de los comités de crisis (cadenas de abastecimiento, sectores de bancas integrándose a un sistema de respuesta nacional, logística, hotelería, entre otros), muchas veces enmarcada esta participación en acuerdos previos que son activados durante las amenazas.

Carlos Uribe centró su exposición en las acciones urgentes que se deben ejecutar para lograr el cambio de paradigma de respuesta y acción frente a amenazas. También destacó la necesidad de comprender mejor la naturaleza multidimensional del riesgo abordándolo desde una perspectiva sistémica.

Con el fin de aumentar la responsabilidad individual y colectiva en la creación y reducción del riesgo destacó la necesidad de enfoques de investigación interdisciplinarios involucrando a contrapartes no tradicionales y permitiendo una acción innovadora y colectiva. Para ello es fundamental vincular las agendas de desarrollo, medio ambiente y reducción de riesgos a todo nivel y en todos los sectores, porque el enfoque sistémico implica integración multisectorial para crear escenarios de riesgos sistémicos.

Uribe llamó al acercamiento entre la Academia y los organismos de toma de decisiones para trabajar juntos y coherentemente en los objetivos de desarrollo sostenible, la reducción del riesgo de desastres y el cambio climático.

La segunda sesión enfocada a la “Comunicación en tiempos de riesgo” estuvo liderada por Brigitte Leoni.

Las principales recomendaciones fueron la consulta de fuentes de información fiables y verificables, investigar cómo son y cómo funcionan los sistemas de salud, conocer los riesgos y quienes están en peligro, el cuidado de los reporteros para no ser un factor más de contagio (instándolos a que sigan las recomendaciones y consignas de la OMS al respecto).

Leoni hizo fuerte hincapié en que es necesario para los periodistas y reporteros apoyarse en la ciencia para evitar la estigmatización que termina por aumentar el miedo y peligro en la crisis. “No puede pasar que se esté denominando como `virus chino´ al COVID-19”.

También destacó el aporte fundamental que puede representar la comunicación en Reducción de Riesgos de Desastres en ayudar a los expertos técnicos a desarrollar y compartir datos, e influir en cómo las personas comunes toman medidas para reducir el riesgo.

Ya enfocados en el COVID-19, Raúl Salazar agregó que “el enfoque de comunicación debe centrarse en un mensaje concreto: la preparación salva vidas”. Es necesario analizar e informar sobre medidas de distancia social y la importancia de mantenerlas en esta fase y en el mediano plazo es central.

También expresó la necesidad de que la reflexión en relación a la reducción de riesgos ante la recurrencia de epidemias, debe comprender la participación y acceso a servicios, información y conocimiento de la población.

Al cierre se destacó que la lección a futuro debe ser adoptar una visión holística a mediano y largo plazo de la problemática involucrando a los diferentes sectores de la sociedad.

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