Organización de los estudios
La oferta educativa de la carrera incluirá los siguientes tipos de actividades curriculares:
- Cursos o asignaturas;
- Actividades de relacionamiento con el medio laboral en el que presumiblemente se desempeñará el egresado;
- Alguna tarea que implique simultáneamente actividad creativa y uso de conocimientos y formación adquiridos (a modo de pequeño proyecto o tesis).
Los cursos serán principalmente semestrales. Se ofrecerá un conjunto de cursos que permita obtener los créditos necesarios. Habrá un sistema de previaturas, de acuerdo a los conocimientos o la formación requeridos para la realización de cada curso, que fueran impartidos en otro u otros cursos. El sistema de previaturas asegurará la posibilidad académica de cursar con aprovechamiento cada curso.
Este plan deja flexibilidad para que la implementación defina la grilla específica de cursos y previaturas; y también a los estudiantes para realizar una trayectoria curricular adecuada para ellos. Sin embargo, es importante hacer notar que una formación técnica en ciberseguridad requiere de ciertos conocimientos y habilidades básicas en matemática y computación que deberán ser adquiridos sobre el comienzo de la carrera. Es por esto que se visualiza una carrera en donde la formación básica esté concentrada en el primer año y la formación específica en ciberseguridad en el segundo, quedando el tercer año para temas avanzados, pasantías, proyectos y estudios especializados en alguna sub-área de la disciplina.
Dentro de las distintas áreas podrán ofrecerse cursos obligatorios y electivos. Las formas de evaluación serán definidas por cada curso, pudiendo tener éstos pruebas parciales, trabajos obligatorios o exámenes.
Una vez aprobado un curso se entiende que se ha adquirido la cantidad de créditos asignados a éste.
Es deseable que la mayoría de los cursos integren, en la medida de lo posible, teoría y práctica. Para una formación en ciberseguridad es fundamental contar con ambientes de experimentación y entrenamiento en los cuales el estudiante pueda ensayar sobre plataformas que reproduzcan ambientes de producción, incluyendo sus vulnerabilidades, técnicas y herramientas, y reproduciendo problemas reales. En este tipo de ambientes el estudiante podrá tener contacto directo con problemas de seguridad de la vida real, y realizar actividades como montar ataques sobre una infraestructura realista, entrenar las respuestas adecuadas frente a un incidente, investigar las evidencias disponibles en los sistemas atacados, o asegurarlos para que los incidentes no se repitan.