Trabajo y vida independiente
Cada vez más jóvenes y adultos con síndrome de Down trabajan en empresas privadas o en empleos públicos, de acuerdo a sus posibilidades. En Uruguay existen leyes que promueven la contratación de personas con discapacidad en el sector público y privado. Por ello es importante que las personas con síndrome de Down continúen formándose a lo largo de la vida.
Vale la pena aclarar que las personas con síndrome de Down que trabajan no pierden la pensión por discapacidad.
El trabajo dignifica y ayuda a que la persona con síndrome de Down adquiera autonomía económica y amplíe sus oportunidades para una vida independiente.