1.1. Principales destinos del gasto presupuestal
El gasto presupuestal creció 96% en términos reales en el período 2005-2018, situándose en torno al 28,6% del Producto Interno Bruto (PIB) en el año 2018. Se han fortalecido significativamente los gastos de los organismos de la enseñanza, el principal prestador público de salud y la seguridad ciudadana, habiéndose más que duplicado sus asignaciones en los últimos 14 años, como se detallará posteriormente. Adicionalmente, han crecido fuertemente las transferencias a la Seguridad Social, que representaron el 21% del total del incremento de gasto del período 2005-2018.
Los gastos con menor grado de discrecionalidad en el corto plazo corresponden principalmente a las transferencias a la Seguridad Social, los intereses de la Deuda Pública y los aportes de Rentas Generales para el financiamiento del FONASA.
Las transferencias a la Seguridad Social representaron el 21% del total del incremento del gasto del período 2005-2018. Entre 2005 y 2009, dichas transferencias disminuyeron en términos del PIB acompañando un proceso de crecimiento económico, aumento del empleo y del salario, para luego mantenerse relativamente estables en torno a un 5,4% del PIB. A partir del 2015, las transferencias a la Seguridad Social comenzaron a incrementarse significativamente hasta alcanzar un 6,8% del PIB en 2018, lo cual fue originado principalmente por el impacto gradual de la flexibilización en el acceso a la jubilación aprobada en 2008, el aumento de las jubilaciones por invalidez y el incremento de los subsidios por enfermedad, maternidad y paternidad.
Adicionalmente, la reforma del Sistema Nacional Integrado de Salud asignó recursos públicos para incorporar gradualmente más beneficiarios y extender las prestaciones incluidas en la cobertura, requiriendo un aporte creciente de Rentas Generales para el financiamiento del Fondo Nacional de Salud. Esto implicó que dichas erogaciones absorbieran el 8,5% del total del incremento del gasto del período, pasando del orden de 1.000 millones de pesos en 2008 a más de 21.000 millones en 2018.
Estos incrementos fueron compensados parcialmente por una reducción de los intereses de la deuda pública de 9% en términos reales en el período 2005-2018, lo que también se ve reflejado en la disminución de estos gastos en términos del PIB que pasaron de 5,3% en 2004 a 2,9% en 2018.
El gasto de los Organismos del artículo 220 de la Constitución creció un 163% en términos reales en el período 2005-2018, absorbiendo un 39% del total del aumento. Se destacan por su incidencia ANEP, seguido por ASSE, INAU y UdelaR.
El gasto de estos organismos se incrementó fuertemente medido en términos del PIB, pasando de representar un 4,9% en 2004 a un 7,7% del PIB en 2018.
Por otro lado, el gasto de la Administración Central, si bien creció fuertemente, incrementándose 82% en términos reales en el período 2005-2018, lo hizo a una tasa que es casi la mitad de la de los Organismos del artículo 220 de la Constitución. Los incrementos del gasto en este caso acompañaron el crecimiento del PIB, manteniéndose relativamente estables en todo el período en torno al 5,5%.
El gasto de la Administración Central representó un 22% del total del aumento del gasto del período 2005-2018 y se destinó, principalmente, al Ministerio del Interior, Ministerio de Desarrollo Social (MIDES), Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente (MVOTMA) y al Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP).