Ministerio de Industria, Energía y Minería

La ministra de Industria, Energía y Minería, Carolina Cosse, participó el viernes 12 de octubre de la presentación del Programa de Contratación Pública para el Desarrollo Científico-Tecnológico y la Innovación (proyecto Nº 21 del Primer Plan de Transformación Productiva y Competitividad). La actividad se realizó en el salón de actos de Torre Ejecutiva Norte.

El programa, también denominado Compra Pública Innovadora, se enmarca en el Sistema Nacional de Transformación Productiva y Competitividad (Transforma Uruguay) y cuenta con la participación del Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM), el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), la Secretaría Nacional de Ciencia y Tecnología, la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII) y la Agencia de Compras y Contrataciones del Estado (ACCE).

Además de Cosse, entre los disertantes estuvieron el subsecretario del MEF, Pablo Ferreri; el director de la OPP, Álvaro García; el director de la ANII, Fernando Brum; el secretario de Ciencia y Tecnología, Eduardo Manta; y el coordinador general de la ACCE, Daniel García.

La compra pública tiene reconocido potencial como factor de dinamización de las capacidades nacionales de innovación. La compra pública innovadora tiene como objetivo mejorar la eficiencia del sector público y la calidad de sus servicios, a través de la incorporación de bienes y servicios innovadores, y estimular el desarrollo científico-tecnológico y la innovación a nivel nacional.

Medidas estructurales

“El mundo digital, de la biotecnología y de la nanotecnología es el desarrollo del futuro; es el desarrollo actual de los sectores con crecimiento exponencial, que son los sectores que van a impulsar la economía a nivel mundial”, afirmó la ministra.

“Por eso en Uruguay, reconociendo todos los avances que hemos tenido, es importante que, después de haber acumulado proyectos de apoyo al desarrollo (del mundo digital y las disciplinas científicas conexas), estemos trabajando ahora en proyectos estructurales”, señaló.

“Esta es la primera de un nuevo tipo de medidas mucho más estructurales, que trascienden un programa de apoyo, porque está resolviendo muchas cosas al mismo tiempo. Primero, estamos dando la posibilidad a organismos públicos y empresas públicas de que planteen un problema concreto, que mejoren el análisis de ese problema públicamente con los oferentes que se planteen interesados a resolverlo, y que después avancen hacia la compra de ese producto innovador que resuelve el problema. Es realmente usar la herramienta de compras públicas como un motor de desarrollo hacia adelante”, afirmó Cosse luego del evento.

Por ello, junto a esta medida, se tomarán otras de carácter estructural, apoyadas en el desarrollo de centenares de programas con foco en las micro, pequeñas y medianas industrias, entre las que se encuentran un proyecto de ley de promoción a la investigación y el desarrollo científico y tecnológico que el MIEM y el MEF se encuentran preparando. “Será uno más de estos cambios cualitativos que ahora Uruguay puede y necesita dar, porque el futuro y el mundo están cambiando”, aseveró.

Junto a estos programas, se deben sumar “el avance del gobierno electrónico, para abatir la burocratización; y el desarrollo mancomunado con los trabajadores  y con las empresas para detectar los puntos de apertura en las válvulas que traban el desarrollo industrial”.

Empresas públicas: camino de desarrollo

Por otra parte, Cosse dijo que las empresas públicas deben “reconocer su camino, y el inmenso desafío y el valor que tienen para continuar el desarrollo del Uruguay, traccionando con su desarrollo el del sector privado a su alrededor”.

“Por ejemplo, nosotros logramos cambiar la matriz eléctrica, que es casi 100 % renovable (…). El siguiente desafío que aparece es el almacenamiento de esa energía, y ahí surge el proyecto de transporte eléctrico, una de las mejores maneras de almacenar energía, que además tracciona nueva industria, impulsa bienestar para los ciudadanos, genera innovación a su alrededor y mayores capacidades en los trabajadores”, señaló.

A su vez se preguntó: “¿No será hora de plantearse la posibilidad de que Antel sea una aceleradora de empresas de tecnologías de la información, planteando sus propios problemas y generando casos de uso para poder resolver esos problemas?”.

Finalmente, propuso que el campus de Ancap donde se encuentra el centenario Instituto de Química, con destacadas obras arquitectónicas de Eladio Dieste y Rafael Lorente “casi abandonadas”, se transforme en un polo innovador “vinculado con la industria química actual, aprovechando activos que tiene Ancap”.

“Yo invito a la reflexión en ese sentido. Creo que esta medida que estamos lanzando hoy es un primer puntapié para, conscientemente y de manera muy dirigida, utilizar las compras públicas como una herramienta de desarrollo hacia el futuro, de desarrollo innovador. Estoy segura de que el sector privado lo va a saber reconocer y aprovechar”, finalizó la ministra Carolina Cosse.

Sobre un programa innovador

La jerarca explicó a la prensa que este programa es una nueva herramienta formal para que las empresas y los organismos públicos compren innovación, “de manera de estimular la investigación y el desarrollo en las empresas privadas”.

“Es un trabajo interinstitucional que hemos realizado, que les va a dar oportunidades de desarrollo a las pymes que puedan solucionar problemas. El planteo es diferente: en vez de licitar la solución, los organismos públicos plantean un problema a resolver en términos bien definidos. Se hace una primera exploración abierta del mercado, recibiendo propuestas de cómo resolverlo, y según eso se aprende y se vuelve a reformular el problema para licitar la solución”, explicó.

También agregó que los procesos son públicos, para así impulsar la innovación abierta, relevante a nivel mundial porque permite compartir los resultados de los costosos procesos de innovación.

Cosse agregó que es importante que la propiedad intelectual de la solución sigue siendo de la empresa que gana  la adjudicación. Después se podrá pasar a una fase comercial en la que, por ejemplo, el organismo público que licitó el proceso podrá comercializarlo.

En el evento se presentaron las bases del nuevo programa y se convocó a los interesados a un proceso de consulta pública por un plazo de 30 días. El proyecto está disponible para consulta en transformauruguay.gub.uy.