1.7 Sintomatología
El síntoma típico es la presencia de ramas con amarillamiento de las hojas que se destaca contra el verde típico de la planta cítrica, pero pueden presentarse otros síntomas en distintos órganos de la planta.
En hojas:
El síntoma típico es el moteado difuso que se caracteriza por coloración amarillo pálido con áreas de color verde, manchas irregulares, asimétricas a ambos lados de la nervadura central, que pueden observarse en el haz y envés de las hojas; engrosamiento y aclaración de las nervaduras. Con la evolución de la enfermedad pueden surgir nuevos brotes que pueden presentar hojas pequeñas, rectas y amarillas. También puede presentarse una defoliación importante de las plantas de las plantas.
A veces estos síntomas pueden confundirse con deficiencias minerales (zinc, hierro, calcio, nitrógeno, magnesio y cobre) u otras enfermedades (como la Clorosis Variegada de los Cítricos y gomosis (Phytophthora spp.).
En ramas y troncos:
Los síntomas comienzan a aparecer en una rama de la planta destacándose del resto de la copa del árbol, llegando posteriormente a tomar toda la copa. También puede observarse reducción del crecimiento y muerte de las ramitas. Por debajo de la corteza se pueden presentar lesiones necróticas, con coloración anormal (zona cambial) con acumulación de almidón.
En el sistema radicular:
Reducción significativa de su desarrollo.
En frutos:
Se presentan deformados (asimetría con respecto al eje longitudinal), reducción de tamaño, aparición de manchas verde pálido que contrasta con la coloración normal e inversión del color en frutos próximos a la maduración (color verde en el extremo estilar y no en la zona de inserción del pedúnculo como sería lo normal). En los frutos sintomáticos, se observa el aborto de semillas, menor contenido de jugo con alteraciones en su composición, debido a una mayor acidez y menor contenido de azúcares confiriéndole un sabor amargo lo que determina que no sean aptos para su consumo en fresco o procesamiento industrial. En la inserción del pedúnculo y en los haces vasculares en un corte longitudinal (columnela), se observa una coloración anormal amarillo-anaranjada; el albedo, en algunos casos, puede presentarse engrosado y puede ocurrir una caída prematura de frutos.
En una planta afectada, no necesariamente se presentan todos los síntomas en forma simultánea, por lo que, para la identificación a nivel de campo, debe evaluarse la sintomatología en su conjunto. Debe tenerse en cuenta, además, que existen factores que influyen en la manifestación de los síntomas tales como:
La especie o híbrido:
- El HLB es una enfermedad que, si bien afecta principalmente a todas las especies comerciales de cítricos pueden manifestar síntomas en diferentes niveles de expresión y la susceptibilidad es variable según la especie, siendo mayor en naranja (Citrus sinensis), mandarina (C. reticulata), lima mexicana (C. aurantifolia) y lima persa (C. latifolia) y son menores en naranja trifoliada (Poncirus trifoliata) y sus híbridos, así como en pomelo (Citrus grandis) y limón (C. limón).
El estado nuticional de las plantas.
- Frecuentemente los síntomas se enmascaran o confunden con los ocasionados por deficiencias nutricionales (zinc, hierro, magnesio, etc.).
La edad de la planta:
- Los síntomas se expresan mejor en árboles jóvenes y vigorosos; pudiendo inclusive morir en poco tiempo.
La época del año
- Los síntomas son más evidentes en otoño – invierno dado que el amarillamiento de sectores de la copa se observa mejor por contraste con el verde normal de las hojas.