Impacto y futuro
Los esfuerzos realizados hasta la fecha están teniendo un impacto auspicioso en diversos sectores estratégicos. En la salud, la IA se utiliza para mejorar el diagnóstico y tratamiento de enfermedades, así como la gestión de datos de pacientes. En la agricultura, tecnologías como la detección de malezas y la optimización del riego están transformando la producción agrícola. En el sector energético, la IA ayuda a gestionar y optimizar la producción y distribución de energía, especialmente en proyectos de energías renovables.
Estas iniciativas reflejan el compromiso de Uruguay con la innovación y el desarrollo tecnológico. La colaboración continua entre el Estado, la academia, la sociedad civil y el sector privado será crucial para enfrentar los desafíos futuros y aprovechar las oportunidades que la IA ofrece, siempre con un enfoque ético y respetuoso de los derechos humanos.
Contar con una nueva Estrategia de IA de alcance nacional, articulada con todos los instrumentos de la política digital del país y otras estrategias nacionales, es clave para continuar y fortalecer la colaboración entre los múltiples partes interesadas en favor del desarrollo sostenible, fomentar la innovación, contar con políticas horizontales y sectoriales consistentes con los estándares internacionales, asegurar que los beneficios de la IA sean accesibles para todas las personas, y potenciar el liderazgo regional de Uruguay y la participación del país en los distintos esfuerzos para la gobernanza global de la IA. La Estrategia se convierte también en un importante instrumento para avanzar en la implementación de los compromisos asumidos en el marco del Pacto Digital Global, aprobado por resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas el 22 de septiembre de 2024 en la Cumbre del Futuro.