Líber Falco
TIEMPO Y TIEMPO
LÍBER FALCO
La suya es una poesía íntima, auténtica, despojada, intuitiva, de musicalidad escondida, que tiende al diálogo pues siempre se dirige a alguien: un Tú, un Vosotros o un Usted. No se percibe en ella una influencia notoria de las tendencias poéticas de aquel momento, ni tampoco una búsqueda deliberada de innovación. Todo ello le otorga su originalidad.
Sus poemas están recorridos fundamentalmente por la soledad, la amistad, la muerte y el tiempo.
‘Pero, ¿por qué no hablas? ¿Es preciso acaso, que no hablen los muertos? Dime qué cosas callas. Qué es, lo que calla tu silencio. ¿Por qué tú, mi amigo, como los muertos todos callas?' (A Piccatto)
Han habido observaciones críticas a su poesía: ‘flaquezas del ritmo, ocasionales prosaísmos, escasez de metáforas', ‘no más que un balbuceo'; frente a ellas se ha contrapuesto, entre otras fortalezas, el carácter esencialmente oral de sus versos.
Falco, de escasa formación intelectual, se desempeñó en pequeños oficios. Llevó una vida sencilla y monótona, solo alterada por la bohemia de las tertulias de café.
El canto popular contribuyó a su divulgación con versiones de sus textos, por ejemplo de Daniel Viglietti, Los Olimareños o Abel García.