Mariel Fonsalía
Paysandú nace como puerto de embarque de productos ganaderos alrededor del año 1750. Antes había sido un lugar de paso, donde ganaderos y sus tropillas atravesaban el río en busca de pasturas. Debe su nombre a la isla que se encuentra frente de la ciudad que los guaraníes llamaban Y-Paúzando. La transformación de lugar de paso en puerto natural y luego en caserío, y de eso en pueblo, o en villa y finalmente en ciudad es algo que sucedió, pero no hay un acta fundacional, muchos locales dicen que Paysandú es como un árbol a la orilla del río. Paysandú creció casi naturalmente, y llegó a transformarse durante buena parte del siglo XX en la segunda ciudad de Uruguay en población.
En 1864 se ganó el sobrenombre de La Heroica cuando el grueso de su población y los soldados de la ciudad, bajo las órdenes del general Leandro Gómez, resistieron valientemente a una fuerza combinada del Imperio del Brasil y las tropas del general Venancio Flores.
El saladero Santa María se instaló en 1871, con él el flujo migratorio aumentó significativamente, y acompañando el crecimiento de población surgieron escuelas y el hospital. El boom de crecimiento es mantenido por la instalación de grandes curtiembres, aceiteras, cervecería, ingenio azucarero, fábricas textiles, laminado decorativo, empresas citrícolas entre otras industrias. El caso de las cervezas es particular ya que se transformó en uno de los grandes símbolos de la ciudad. La Fiesta de la Cerveza convoca a miles de personas todos los años, es una de las fiestas más populares a escala nacional. Si bien la producción cervecera ha decaído en cantidad, han surgido varias cervecerías artesanales con producción propia que mantienen en alto la identidad sanducera como ciudad cervecera.
La música tiene en Paysandú una ciudad cómplice, artistas de la talla de Ana Prada y Los Iracundos, entre muchos otros, son sanduceros.
El desarrollo productivo de Paysandú generó un tejido social muy particular, vinculado a la cultura obrera-fabril. El fuerte asociativismo de su sociedad es en parte producto de ese legado, y es así que hoy vemos terrenos ocupados por los esqueletos de viejas fábricas transformados en nuevos barrios, como el barrio cooperativo Paylana. La ciudad también piensa en su futuro y ha diseñado un masterplan con el objetivo de pensar en el mediano y largo plazo, rediseñar su relación con el río, con las crecidas, evitar las inundaciones, buscar la sustentabilidad y la resiliencia urbana. Como toda ciudad, Paysandú está en constante transformación, los sanduceros en particular han dibujado un horizonte al cual quieren caminar.
Mariel Fonsalía, diseñadora gráfica egresada de la Escuela Nacional de Bellas Artes, formada en el taller Anhelo Hernández. Estudió también con los artistas Nelbia Romero, Óscar Ferrando y Álvaro Pemper. Participó en muestras colectivas en Subte Municipal de Montevideo y Alianza Francesa, en el IV Salón de Arte Digital (Maracaibo, Venezuela) y el VI Salón y Coloquio Internacional de Arte Digital en La Habana, Cuba. Ha dirigido videoclips para las bandas Buenos Muchachos y Ojos del Cielo y presentado creaciones visuales en conciertos del músico Federico Deutsch. Trabaja a nivel local y regional en proyectos editoriales, gráficos y web, de forma independiente, integrando equipos interdisciplinarios desde hace más de 15 años.